CRISIS FINANCIERA

La aseguradora AIG, al borde del abismo

La de Lehman Brothers no es la única situación empresarial complicada en Estados Unidos en las últimas horas. Todos los ojos miran ahora a la aseguradora AIG, a quien se le agota el tiempo para reunir una cantidad millonaria con la que evitar su bancarrota. De hecho, el gobernador de Nueva York, David Paterson, aseguró que sólo dispone "un día", mientras se confirmaba que la Reserva Federal no saldría a su rescate, como sí hiciese con las hipotecarias Fannie Mac y Freddie Mae.


En cambio, el banco central pidió a JPMorgan Chase & Co y Morgan Stanley que proporcionen a AIG un crédito de entre 70.000 y 75.000 millones de dólares, según una fuente de la propia aseguradora, que paga con una bancarrota inminente las pérdidas de 18.000 millones de dólares en los tres últimos trimestres. Con su fin, más de 100.000 empleados se quedarían en la calle.


Tanta expectación se dejaba sentir en Wall Street, donde AIG se desplomaba de nuevo, un día después de perder un 60,8%. En ese mismo escenario, también se notaba la bajada del mayor banco de inversión estadounidense, Goldman Sachs. La causa, en su caso, reside en la publicación de los últimos resultados empresariales, ya que hoy informó de una caída del 70% en sus ganancias trimestrales, hasta un beneficio neto de 845 millones de dólares (597 millones de euros)


De esta forma, continúa un efecto dominó que también ha alcanzado al banco Lehman Brothers, quien se acogerá al capítulo 11 del código de bancarrota de Estados Unidos tras llevar días buscando comprador sin éxito. En este sentido, Barclays confirmó que está manteniendo conversaciones con a entidad para comprar parte de sus activos, si bien el acuerdo de momento permanece en el aire. Queda por ver, además, como afectará la situación de Lehman a otras empresas, puesto que ING ya informó de posibles pérdidas de 100 millones de euros antes de impuestos.