La empresa aragonesa Hispano Carrocera ha optado por encarar la crisis de frente y ha decidido modificar, en poco más de ocho meses, su gama completa de productos.

Según explicó ayer Pedro Cotera, director comercial de Hispano, durante la presentación del nuevo autocar de lujo Xerus, "esta decisión (de completa renovación) marca un antes y un después, no solo para Hispano sino para el sector carrocero". Tanto Cotera como Javier García, director de Relaciones Institucionales, recordaron que los efectos de la crisis están siendo nefastos para las empresas que se dedican a fabricar vehículos para transporte de viajeros por carretera (sobre todo en el segmento de gran turismo): las grandes compañías han pospuesto sus decisiones de compra y renovación de flotas, por lo que los pedidos han caído. En opinión de ambos, el año próximo todavía no será bueno para el sector; en el mejor de los casos, la crisis va a tocar fondo, pero todavía no va a despuntar.

Ante estas perspectivas, la compañía aragonesa ha entendido que la mejor estrategia comercial pasa por una renovación total de sus productos, "no solo desde el punto de vista del diseño, sino también de los avances tecnológicos -explicó García- con este cambio asumimos el reto, el impulso, de desmarcarnos de nuestra competencia y damos un salto de calidad y modernidad en los tres segmentos de producto y para todos los mercados".

Esto se traducirá en que en menos de un año, Hispano va a presentar modelos nuevos de autobuses en sus tres segmentos de productos. Ayer le tocó el turno al Xerus, un autocar de lujo para largo recorrido que será el sustituto del Divo (anterior gran turismo de la marca). Para la presentación del Xerus, Hispano eligió las instalaciones y el circuito de velocidad de Motorland (la Ciudad del Motor de Alcañiz).

Tras el Xerus, y en unos pocos meses, se presentará el nuevo Intea (un autobús que se ofrecerá en dos versiones: cercanías y consorcio) y en el primer semestre de 2010 se lanzará el nuevo Habit, un vehículo para el segmento urbano. El director de Relaciones Institucionales explicó que tras la entrada de Tata en el capital de Hispano (hace algo más de cuatro años) ya se planteó la modificación total de los productos y la elaboración de un ambicioso plan de competitividad. Con todo ello, la firma aragonesa espera sortear la crisis. De hecho, Pedro Cotera avanzó que las previsiones de fabricación que manejan para el año próximo mejoran considerablemente las cifras con las que acabarán el presente ejercicio. Para 2010 esperan sobrepasar las 400 unidades, en tanto que 2009 finalizarán con una producción que rondará los 300 vehículos. En Hispano trabajan en la actualidad alrededor de 370 personas.