AVALES

GM examinará las inversiones tras el 'no' alemán

Nick Reilly dice que tiene la intención de cumplir con los compromisos adquiridos.

La negativa del Gobierno alemán de conceder avales por 1.100 millones de euros a la filial europea de General Motors podría retrasar las inversiones en nuevos productos previstos por la compañía e incluidos en el plan industrial firmado el 31 de mayo con los sindicatos europeos. "Obviamente, tendremos que examinar el calendario de inversión de los futuros productos con el fin de tener financiación disponible", reconocía el presidente de GM Europa, Nick Reilly, en un comunicado interno transmitido este pasado miércoles a los empleados.


"Sin embargo, tenemos la intención de cumplir con los compromisos adquiridos con los trabajadores en el acuerdo marco europeo y competir con fuerza en los mercados", añadía el responsable del negocio en Europa, aún reconociendo que la decisión anunciada por Angela Merkel "no es la que esperábamos". A pesar de dicha decisión, señalaba, "podéis seguir confiando en nuestro futuro" y pedía a la plantilla de GM Europa "no resucitar el miedo a la insolvencia, ya que con una promesa de inversión por parte de GM de 1.900 millones de euros y la garantía de préstamos/avales recibidos del Reino Unido y de otros gobiernos europeos Opel/Vauxhall está en una mejor posición financiera".


Sin dejar de agradecer a los trabajadores de Opel/Vauxhall el esfuerzo realizado para consensuar la reestructuración, los ahorros y el plan industrial así como a los gobiernos de Reino Unidos, España y Polonia el apoyo prestado, Reilly explicaba que ahora su intención es "examinar todas las alternativas posibles para obtener financiación, incluyendo los estados alemanes con plantas de producción de Opel y solicitud de ayudas a la Investigación y Desarrollo". Asimismo, el responsable de la filial europea de GM confesaba que haber tenido un inicio de año mejor de lo esperado facilitaba el acceso de GM a la financiación bancaria: "Por lo tanto, vamos a analizar si los bancos que estaban interesados en financiar los planes de inversión con la ayuda de los avales del gobierno alemán también podrían estar interesados en participar sin ellos".


Confianza en obtener los avales


En definitiva, una llamada a la confianza de la plantilla es la lanzaba Reilly con este comunicado. Desde Figueruelas, el comité de empresa se mostraba esperanzado en que filnalmente los cuatro länder con plantas de Opel apoyen a GM con avales quizá no con 1.100 millones de euros, pero sí con una cantidad inferior. "No tendría sentido que Alemania dejara colgado ahora el plan industrial de GM porque hay muchos trabajadores implicados, un poderoso sindicato IG Metall, y también los propios estados federados". No obstante, reconocieron que "todo esto retrasa un poco más un proceso que debería estar ya cerrado".