CAJA DE AHORROS

Fumata blanca para el SIP de la CAI

Las asambleas de la CAI, Caja Badajoz y Caja Círculo ratificaron esta semana la fusión 'fría' de las tres entidades. El nuevo grupo financiero -que se llamará Grupo Caja Tres o Banco Grupo Caja Tres- estará operativo en 2011.

La Asamblea de la CAI ratificó esta semana su fusión 'fría' con Caja Círculo y Badajoz.
Fumata blanca para el SIP de la CAI
HERALDO

Ala segunda, la vencida. Caja Inmaculada cerró esta semana su fusión 'fría' con Caja Círculo de Burgos y Caja Badajoz. Dos entidades de ahorro con las que la caja aragonesa se siente cómoda por sus tamaños y porque sus maneras de hacer negocio, de entender la actividad financiera, su estilo y filosofía están muy próximas a las de la CAI, tal y como recordó el viernes el presidente de la caja aragonesa, Juan Pemán.


Pemán explicó también que esta unión no se parecía en nada a la que se había intentado en 2009 con Caja Rioja y la Insular de Canarias, ni por los socios ni por el SIP (Sistema Institucional de Protección) que entonces se quiso negociar (la sede social se iba a instalar en Madrid). Los socios del Grupo Caja Tres -que es como internamente se ha llamado al grupo financiero suma de las tres cajas- están convencidos de que el SIP que han puesto en marcha los va a reforzar y ganarán en solvencia, liquidez y eficiencia.


Las negociaciones llevadas a cabo por los máximos responsables de las tres cajas de ahorros a lo largo de estos cinco meses no han sido fáciles. De las tres, la de mayor tamaño es la CAI, con unos activos de poco más de 11.100 millones de euros; le sigue Caja Círculo, con unos 5.100 millones y la menor es Caja Badajoz, con unos activos cercanos a los 4.800 millones de euros. Sin embargo, de las tres, la que mejores ratios de morosidad y solvencia presenta es la caja burgalesa; de ahí que haya conseguido negociar un peso en la sociedad anónima que da cobertura al SIP y una presencia en su Consejo de Administración superiores a lo que le hubiera correspondido por tamaño. Por contra, la CAI, que aporta a la fusión más de la mitad de los activos (el SIP nace con unos activos de 21.155 millones de euros) tiene mayor peso en los órganos de gobierno del SIP, pero sin alcanzar el 50%.


Apoyos y recelos


También ha sido Círculo la más reticente a la fusión. La caja castallana ha defendido con uñas y dientes su derecho a seguir en solitario, y sectores de la entidad han respaldado hasta el último momento esta posibilidad. Hay que recordar que Círculo fue una de las pocas cajas a las que el Banco de España permitió, de manera expresa (y así trascendió a la opinión pública) tras conocer el plan de viabilidad elaborado por la entidad, seguir en solitario pese a su pequeño tamaño. Este recelo se tradujo en la votación de la asamblea del jueves, donde el sí al SIP contó con el respaldo de 88 consejeros (10 votaron en contra y 12 se abstuvieron). Este apoyo 'raspado' del 80% era imprescindible y necesario para dar luz verde a un asunto de este calado, según la Ley de cajas de Castilla y León. Un voto favorable menos hubiera significado el rechazo al SIP.


En la CAI y en Caja Badajoz las votaciones fueron menos dramáticas y el respaldo más amplio. En Caja Badajoz, el poyo recibido fue del 88% (85 consejeros votaron a favor, 9 en contra y 2 se abstuvieron). En la CAI, la ratificación fue más clara: el 92% de los consejeros dieron su respaldo a la fusión (84 votaron a favor, 3 votaron en contra y 4 se abstuvieron). Las papeletas negativas correspondieron a los dos representantes de UGT en la asamblea y a un consejero por impositores.


En el puesto 14


Tras el último trámite cumplido el jueves, los máximos responsables de las tres entidades de ahorro se mostraron públicamente satisfechos con el nacimiento de un grupo que ocupará el puesto 14 dentro del ranquin de las 18 que conformarán el mapa de cajas cuando todas las operaciones anunciadas estén en marcha.


En cuanto al SIP como tal, la sociedad anónima que le dará cobertura será un banco (la Lorca no permite otra cosa) del que serán propietarias las tres cajas y la sede social (a efectos jurídicos) estará en Zaragoza, pero no tendrá un edificio propio ni oficinas. Las cajas de ahorros seguirán operando con sus marcas y sedes y continuarán realizando la actividad financiera minorista. Las nuevas oficinas las abrirán las cajas con sus marcas propias (no el SIP), dentro de sus respectivos planes de expansión y siguiendo un reparto territorial basado en la proximidad. Al banco le transferirán la actividad mayorista. Habrá tres sedes operativas (en Zaragoza, Burgos y Badajoz) y cada caja tendrá asignadas una serie de áreas de negocio.


El primer presidente del SIP será José Ignacio Mijangos (de Caja Círculo). El cargo será rotativo cada dos años, luego le tocará a Caja Badajoz y a la CAI. Luis Miguel Carrasco (CAI) será el consejero delegado de la sociedad.