PRESIDENTE Y CONSEJERO DELEGADO DE VODAFONE ESPAÑA

Román: "La banda ancha móvil es un elemento

Estuvo hace unos días en Zaragoza, donde expuso sus planes al Gobierno aragonés y habló a este diario de la situación del sector.

Francisco Román, durante la entrevista.
Román: "La banda ancha móvil es un elemento
ESTHER CASAS

¿Qué le trae por Zaragoza?

Alberto Pena (responsable de Vodafone en la zona) y yo nos hemos reunido con el presidente del Gobierno aragonés, Marcelino Iglesias, para hablar de los planes de la compañía en la región, de nuevas inversiones y proyectos. Hemos hablado en concreto de un plan muy atractivo que presentamos con Eva Almunia, del Ministerio de Educación, que se llama tarifa-deberes y entra en el plan Escuela 2.0, en el que los chavales pueden hacer los deberes con un módem USB preparado con un plan especial que permite de 6 a 9 una conexión a Internet con control parental. Hablamos con el Gobierno aragonés de la posibilidad de ponerlo aquí. También hablamos de la transformación de nuestro centro en Walqa.

¿Qué planes tiene para ese centro de Huesca?

Estamos reorganizando nuestras actividades de I+D en todo el mundo. Vamos a concentrar en España, en Madrid, las actividades enfocadas al M2M (machine to machine), que son los dispositivos conectados entre sí inhalámbricamente, es decir, a través de la red móvil. El I+D de esta actividad la vamos a concentrar en España, y al hilo de esto transformaremos la actividad de Walqa, probablemente de menos I+D como tal y mucho más aplicación en relación con este campo de M2M, para aprovechar el flujo de aplicaciones tecnológicas que están en explosión.

Vodafone lleva ya unos años en Walqa. ¿Están satisfechos con su evolución?

En España tenemos mucha actividad en I+D+i. Walqa ha funcionado como un satélite relevante donde se han hecho cosas muy atractivas. Ahora nos interesa encontrar un camino para que Walqa aproveche las corrientes actuales, que son de concentración de esta actividad de I+D y, sobre todo, de potenciación de la actividad orientada a la aplicación, de la i pequeña frente a la i mayúscula.

Señor Román, hace unos diez años le hice una entrevista para HERALDO en Zaragoza (en abril de 2000). Entonces dijo que en un puesto de trabajo había que estar solo durante un tiempo determinado.

Sí, me acuerdo. Le hablaba de cuatro o cinco años.

Entonces era usted consejero delegado de Microsoft Ibérica, y muy poco tiempo después se marchó a Vodafone. Entonces me dije: "Este señor cumple con su palabra, no ha pasado de los cinco años en Microsoft". Ahora, en cambio, lleva usted más tiempo en Vodafone.

Llevo más de siete años en Vodafone y estoy encantado. ¡Es que la cantidad de cosas que nos ha tocado vivir en este tiempo...! Pero bueno, creo en lo que le dije entonces. Vamos a ver, esto es tan flexible como cualquiera lo quiera hacer, pero a mi me parece que uno de los riesgos en las carreras profesionales ahora mismo es estar demasiado poco tiempo en los sitios: hay carreras que durante un tiempo son brillantes porque llegas a un sitio, despiertas muchas expectativas pero abandonas la posición antes de que esas expectativas de verdad cuajen. Y luego está el riesgo contrario, que es estar demasiado tiempo en una función o posición y de alguna manera pierdes frescura, impides la llegada de nuevas ideas. Creo que hay que encontrar un equilibrio.

¿Y cuál es su caso?

Llevo más de siete años en Vodafone y durante este tiempo la compañía se ha multiplicado por dos y medio, y en cuanto a mi posición, al puesto de consejero delegado añadí el de presidente cuando José Manuel Entrecanales nos dejó, con lo que se ha añadido también una función institucional.

¿Cómo ha cambiado el negocio?

Sustancialmente. Yo entré en 2002, pero si miramos atrás, en 2000 este era un negocio construido fundamentalmente alrededor de la voz: lo importante era poder hablar. Hoy en día eso se da por descontado y lo que hay es una explosión de datos móviles. Las previsiones mundiales, dependiendo de a quién preguntes, hablan de multiplicar por 50 o por 100, incluso hay quien dice que se multiplicará por 500 el tráfico actual, lo cual es un desafío para las redes. Para nosotros, como Vodafone, es una satisfacción enorme, el negocio crece mucho -siempre con doble dígito, incluso en estos años de crisis- y también es un desafío en cuanto a calidad y capacidad de las redes. Esperamos que todo el mundo pueda disfrutar de banda ancha móvil.

¿Se puede considerar que el de la telefonía móvil es un sector maduro?

Yo diría que es un sector en el cual hay un tipo de negocio o un tipo de actividad que tiene signos de madurez, como es la voz, y luego hay un montón de negocios o actividades, sobre todo las que están alrededor de los datos y servicios de valor añadido.

¿No está la red demasiado saturada?

La red no está saturada, pero ciertamente es un desafío para los operadores atender esta explosión de la demanda. Y ahí hay dos elementos: uno, inversión, y dos, gestión del tráfico. En el primero, inversión, nosotros mantenemos cifras significativas de inversión, cabe poca duda de que Vodafone es una compañía con una clara apuesta de futuro, incluso en zonas rurales. La inversión tiene que ver con la cobertura y tiene que ver con la capacidad. Por ejemplo, Zaragoza es una de las ciudades donde tenemos nuestra máxima velocidad de datos, 14,2 megas desde hace ya tiempo. Y el otro elemento es la gestión del tráfico: nosotros tenemos sistemas de gestión dinámica que permiten conjugar con distintas prioridades las velocidades evitando la congestión celda a celda. Es decir, en una celda concreta, lo que cubre una antena, atendemos que no se produzca congestión ahí, y regulamos el tráfico. Es importante jugar con ambas cosas, pero es cierto que es un desafío para todo este sector.

Ahora se prepara un reparto de frecuencias. ¿Cómo afectará esto al usuario?

El espectro es fundamental en telecomunicaciones móviles, punto uno. Punto dos: no todas las frecuencias son de igual calidad; cuanto más bajas sean las frecuencias más se facilitan los despliegues por el alcance, por cuestiones de longitud de onda. Por eso es muy importante qué plan tiene cada país para la utilización del espectro. En España se ha abierto a consulta pública el plan del Ministerio. El planteamiento que tiene es sensato, porque atiende a las frecuencias en distintas bandas. Además, está bien pensado para fomentar la inversión y la competencia, que son las dos claves del éxito aquí.

¿Y qué ganará el usuario?

El usuario ganará porque habrá más capacidad.

¿Qué ganará Vodafone?

Poder ofrecer más capacidad si la gestiona adecuadamente a sus clientes. En conjunto, ¿qué es lo que ganamos todos como sociedad? Una respuesta adecuada al desafío que supone la explosión de los datos. Si no dispusiésemos de más espectro y no invirtiésemos en ese más espectro con nuevas tecnologías no seríamos capaces de absorber una demanda que sin duda va a venir. Y eso sería muy serio, porque obviamente las sociedades modernas, las que ahora mismo triunfan, son las sociedades conectadas y las que tienen banda ancha. España, como país, no puede permitirse no desarrollar ese tipo de infraestructura y desarrollarla con sensatez.

¿Cómo está España en relación con otros países, en temas de infraestructuras en el sector?

En general, bien. En los parámetros de la sociedad de la información España no suele destacar. En penetración de Internet, en los PC, en el grado de informatización de la sociedad... Sin embargo, hay un capítulo de la sociedad de la información donde sí estamos entre los primeros países de Europa, y es en todo lo relacionado con la telefonía móvil. Ese es un gran activo para España y creo que es especialmente importante ser conscientes de ello. En estos momentos no hay duda de que la banda ancha móvil es un elemento de recuperación económica: lo avalan el sentido común, la Unión Europea, Estados Unidos... Hay estudios que dicen que por cada diez puntos de aumento de penetración de la banda ancha móvil el Producto Interior Bruto (PIB) de un país puede crecer un punto y medio. Yo creo que es importante saber que en España estamos bien en un elemento de los que originan tracción para recuperarnos en tiempos de crisis económica.

¿Ha afectado la crisis a Vodafone España?

Si atendemos a los resultados de nuestro negocio, en 2009 registramos un descenso de los ingresos, que vino fundamentalmente del descenso de los ingresos del negocio de voz, y éste vino de una rápida evolución a la baja de los precios que no se compensó con el aumento del tráfico. Y luego en paralelo el negocio de los datos creció mucho, pero no tanto como para compensar este decrecimiento.Entonces, ¿nos afecta la crisis? Sí, porque nuestros ingresos han bajado. Con eso dicho, hemos manejado los costes en línea con los ingresos, hemos mantenido márgenes, hemos mantenido más o menos rentabilidad y esto sin sacrificar inversiones, que para nosotros es muy importante.