La gran pregunta que se hacen ahora la mayoría de los trabajadores de Figueruelas es de dónde van a ahorrar 25,8 millones de euros cada año, de acuerdo a los planes de Magna. Esa es la gran incógnita que los sindicatos esperaban haber podido empezar a resolver este pasado viernes en la reunión a la que les había convocado GM y que finalmente fue aplazada. Hasta ahora la compañía ha anunciado cuánto tiene que ahorrar cada fábrica, pero no ha fijado cómo. Todas las plantas europeas, excepto Figueruelas, tienen más adelantada la manera de hacer caja, pero aquí, al haber costado más llegar a un preacuerdo sobre el plan industrial y al ser esa la premisa para hablar del plan de ahorro, apenas se ha abordado todavía este tema.

"Inglaterra y Alemania parece que han renunciado a parte de los planes de pensiones que allí paga la empresa para poder cumplir con su plan de ahorro. En casi todas las plantas de Opel las líneas maestras parece que pasan por las congelaciones salariales y supresión de parte de las pagas extras, pero son todavía cosas muy indefinidas, que hay que chequear cuidadosamente y que están sin firmar", señaló el secretario general de Industria de CC. OO. Salvador Salas. "En algunos países se ha hablado también de quitar el servicio de lavandería o el de cafetería, pero lo cierto es que a día de hoy solo tenemos borradores de lo que otros compañeros europeos piensan hacer sin haber concretado nada en Figueruelas", admitió.

Necesidad de una base europea

Tanto CC. OO. como UGT están a la espera de que se convoque de nuevo la reunión del Foro Europeo de Empleados para saber qué directrices comunes marcará la empresa tanto para el plan de ahorro como para los despidos. "De alguna manera, estamos esperando una orientación a nivel general: ver si los alemanes establecen un mínimo de días por cada despido o ver cómo se hace", apuntó Salvador Salas. Sin embargo, "lo primero que ha de hacer Magna es comprar la empresa, porque está alargando los plazos continuamente". La mirada está puesta ahora en la reunión del consejo de administración de GM que tendrá lugar el próximo martes en la sede de la compañía en Detroit. "A partir de ahí, veremos a ver qué pasa con el negocio europeo y si nos convocan para hablar ya de planes de ahorro y reestructuración", añadió.

El plan de ahorro negociado en las distintas plantas europeas es todavía algo muy opaco. Al parecer, a nadie le interesa de momento contar lo que piensa hacer para ahorrar. "Falta la parte que hace llorar y ahí nos vamos a retratar todos", comentó Luis Tejedor, secretario general del Metal de UGT Aragón, que advirtió que "sin aportar un sacrificio salarial, a ninguna planta le van a dar crédito para seguir adelante".

"En el tema de congelaciones salariales, todas las plantas van a tener que entrar, unos al 50% y otros en mayor medida. En la cuestión de reducción de pagas, también habrá que entrar, aunque para algunos países como Polonia o Hungría, que no tienen pagas, es imposible. En el caso de Figueruelas, en lugar de tocar las extras, se podría ahorrar con pagas que la plantilla tiene por cumplir objetivos de calidad o primas de convenio, o descuentos para la compra de coches u otros pluses. La verdad es que hasta que no nos sentemos a hablar con la empresa y nos haga una propuesta, no podemos decir nada del plan de ahorro", explicó Pedro Bona, secretario general de UGT. De momento, algunas cuestiones que se han barajado como quitar las ayudas al transporte, al comedor o el servicio de lavandería no dejan de ser sugerencias. Algunas fábricas las tienen ya pactadas, pero no se empezarán a implantar hasta el año que viene, recordó Bona. En su opinión, es preciso que se convoque de nuevo la reunión del Foro Europeo para hablar de plazos y condiciones generales del plan de ahorro, ya que "algunos países decían que no se podía ir a un plazo tan largo como 2014 para ahorrar costes".

Aún con todo, Luis Tejedor entiende que "estamos hablando de una empresa quebrada con agujeros económicos inmensos, por lo que todos tendremos que hacer un esfuerzo salarial para que salga a flote, y a cambio nos darán una participación del 10%, que todavía no se ha concretado".

Cuanto antes se negocie todo, mejor, porque el crédito puente de la sociedad fiduciaria se agota, recordó Tejedor, que exigió que "el ahorro se haga de forma proporcional a los salarios que perciban las personas que sigan trabajando en Figueruelas, pero sin olvidar en ningún momento que si estás en una empresa quebrada, no te queda otra alternativa que perder". A su juicio, "habrá aristas difíciles de salvar en esta negociación, pero no queda otra, o ahorramos los 25,8 millones que nos piden al año o la nueva Opel dejará Figueruelas en el camino".

Habrá que discutir mucho

Tejedor considera que serán necesarias muchas horas de discusión para acordar el plan de ahorro, que, finalmente, junto con el ajuste, se someterá a referéndum para ser votado por toda la plantilla. "Que nadie se engañe pensando que con una rebaja de los salarios del 5% cumplimos, porque eso no es así. 25,8 millones de euros al año es mucho dinero y lo tienen que ahorrar entre todos los que se queden en la factoría", advirtió. Lo urgente, dijo, es ahora que Magna se haga con la empresa y se ponga en marcha un plan de viabilidad planta por planta.