El portavoz de FACUA-Consumidores en Acción, Rubén Sánchez, ha dicho que "la única forma viable" para que las tarifas de las comunicaciones móviles bajen "es que intervenga el Gobierno, al igual que ha hecho la Unión Europea".

Sánchez ha explicado en rueda de prensa los resultados del estudio que ha elaborado la organización de defensa de los derechos de los consumidores sobre las tarifas para particulares de las operadoras móviles, que incluye una comparativa entre Movistar, Orange y Vodafone, las pequeñas operadoras Másmovil, Simyo, Yoigo y Pepephone.

Del estudio se desprende que las tres grandes operadoras, que acaparan más de 50 millones de líneas, "no han bajado sus precios, pese a lo que intentan hacernos creer" según Rubén Sánchez.

La intervención de Bruselas en el establecimiento de una euro-tarifa máxima para el servicio de itinerancia internacional o 'roaming', supone "un precedente" en palabras del portavoz de FACUA, por lo que dicha regulación "se puede hacer en cualquier estado de la UE".

La acción del Gobierno es, para FACUA, necesaria debido a que "las grandes compañías no compiten entre ellas", y "pactan estrategias conjuntas, como subir un 25 por ciento el establecimiento de llamadas", lo que según Rubén Sánchez "no se corresponde" con el coste real de la conexión "que no supera el medio céntimo".

FACUA ha dado los datos de la comparativa hecha entre las grandes operadoras y las pequeñas, que con su 1,3 millones de líneas "no erosionan" la cuenta de resultados de Movistar, Orange y Vodafone "como para que se preocupen de bajar sus tarifas".

El coste de las llamadas con Másmovil, Simyo, Yoigo y Pepephone oscila en una horquilla de entre los 0,08 céntimos de Másmovil y los 0,12 céntimos de Yoigo, con establecimientos de llamada que no superan los 0,12 céntimos, mientras que para llamadas de similares características, las grandes compañías se mueven entre los 0,16 y 0,47 céntimos por minuto, con establecimientos de llamada de 0,15 céntimos.

De la misma forma, los mensajes cuestan unos 0,12 céntimos en las nuevas operadoras, y alcanzan los 0,15 con las ya consolidadas, que "no han bajado sus precios desde los noventa" según el portavoz de FACUA, Rubén Sánchez.

Esto supone que en los mensajes, al igual que en las llamadas, hay una diferencia de precio que puede ir desde un 30 a un 123 por ciento.