Los trabajadores de Luna Equipos Industriales se han encerrado en la fábrica de Huesca, en protesta por el desarrollo del proceso de negociación del expediente de regulación de empleo, que extingue los 200 contratos de la empresa metalúrgica oscense.

El comité de empresa ha iniciado junto a los trabajadores este encierro hasta que el juez dicte la resolución de extinción de contratos y pretenden que durante este tiempo se solucionen algunos aspectos importantes sobre las indemnizaciones y los salarios.

Se trata de un encierro "pacífico y rotativo", según ha apuntado el representante de UGT, Luis Tejedor, quien ha explicado que se pretende que por él puedan pasar los 200 trabajadores de las fábricas de Huesca y Almudévar, que viven una situación límite, ya que se les debe varias mensualidades y casi han agotado el paro con los sucesivos expedientes temporales.

Los trabajadores manifiestan su malestar, además, porque el juez les ha denegado la investigación de las cuentas de otras empresas ligadas a Luna, como Gruyma y Campo Redondo.

Tejedor ha manifestado que "los trabajadores quieren mostrar a la opinión pública su situación y, sobre todo, para que la sociedad vea a dónde nos lleva facilitar a las empresas la creación de sociedades interpuestas, ya que hemos visto que los trabajadores que llevan más de 40 años en la empresa van a ser los más perjudicados, porque cobrarán el mínimo que garantiza el Fondo de Garantía Salarial y por parte de la empresa no cobrarán nada".

Así, ha opinado que "si no existiese el Fondo de Galanía Salarial, los trabajadores se quedarán en la ruina laboral más absoluta, porque la empresa les debe hasta cuatro meses de salario, han gastado más de doce meses de desempleo y la situación de insolvencia de la empresa está ahí".