En Magna no hacen comentarios

La empresa austríaco-canadiense Magna, fabricante de componentes para la industria automovilística, declinó este miércoles, en Austria, comentar la decisión de General Motors (GM) de no venderle el fabricante de automóviles Opel.


"Hemos difundido un comunicado. Más allá del comunicado no hacemos ningún tipo de comentario", subrayó un portavoz de Magna Internacional desde su sede en Oberwaltersdorf, en el Estado federado de Baja Austria, cerca de Viena.


En esa nota, colgada en la página web de Magna International, la compañía dice "comprender" la decisión de GM de no desprenderse de su filial europea.


"Seguiremos apoyando a Opel y a General Motors en los desafíos que tienen ante sí", aseguró en el comunicado el consejero delegado de Magna, Siegfried Wolf.


El consejo de administración de GM anunció ayer desde Detroit que daba marcha atrás en sus planes de vender Opel a Magna, y su disposición a elaborar su propia alternativa de reestructuración, con un coste de 3.000 millones de euros.