La Asociación de Empresarios de la PlaZa (Aepla) ha reivindicado la construcción de un acceso pendiente al parque empresarial con el que se evitaría un gasto de unos 5 millones de euros anuales asociados al coste de mantenimiento y funcionamiento de los vehículos que se trasladan hasta la plataforma logística.

Esa es la principal conclusión de un informe sobre el flujo de vehículos al área empresarial de PlaZa y su impacto económico y ambiental elaborado en periodos en los que no había actividades especiales en la zona comercial ni en la Feria de Muestras.

Según ese estudio, que ha explicado el presidente de Aepla, José Miguel Guinda, el 60 % de los vehículos que acceden a la zona empresarial se ven obligados a realizar, en un mínimo de dos recorridos, 7,4 kilómetros diarios adicionales al no haberse ejecutado la entrada que uniría la calle Turiaso con una rotonda de la antigua carretera de Madrid, con un puente que costaría unos dos millones.

El 84 por ciento del total de vehículos que acceden a PlaZa lo hacen a la zona empresarial (15.911 diarios de lunes a viernes y 6.318 los sábados), el 60 por ciento desde la Z-40 y la N-IIa y el 40 por ciento restante, por la Ronda Norte.

Según los cálculos de Aepla, los vehículos recorren 16,7 millones de kilómetros adicionales al año y eso se traduce en un coste de 5 millones asociados al mantenimiento y funcionamiento de los vehículos (1,5 de ellos, en combustible), en 278.900 horas más de conducción (lo que equivale a la actividad anual de una empresa con 158 trabajadores) y en la emisión de casi 2.000 toneladas de CO2.

Ese coste adicional lo tienen que soportar las empresas o los trabajadores, y eso afecta a la competitividad, ha advertido Guinda.

El informe se basa en las mediciones de flujos de vehículos en las entradas y salidas de PlaZa realizadas el año pasado por una empresa especializada, entre el 20 y 26 de septiembre, en los mismos días de octubre y del 7 al 13 de noviembre, en colaboración con el Ministerio de Fomento, el Gobierno de Aragón y el subsector de Tráfico de la Guardia Civil.

La falta de ese nuevo acceso -que según Guinda no tenían ninguna voluntad de impulsar el anterior consejero de Obras Públicas, Alfonso Vicente, y el exconsejero delegado de PlaZa Carlos Esco- es una de las debilidades que puede frenar el desarrollo de la Plataforma Logística, en la que trabajan unas 15.000 personas.

A esa carencia se une la ausencia de transporte público, ya que actualmente sólo hay un autobús que también comunica con el aeropuerto, y el alto valor catastral de los terrenos, lo que ha supuesto un aumento del IBI del 21 por ciento en los dos últimos años.

Y aunque Guinda imagina que la complicada situación financiera que atraviesa la sociedad de la PlaZa puede afectar de algún modo, ha insistido en que lo que realmente puede suponer un "freno" al desarrollo del parque empresarial son los problemas de accesibilidad.

En ese aspecto, ha apostado por llevar las cercanías hasta PlaZa, pero ha advertido que desde la estación hasta la zona empresarial los trabajadores tendrían que recorrer dos kilómetros, con lo que sería necesario un sistema para distribuirlos, y Aepla tiene pendiente una reunión con la Fundación del Hidrógeno para intentar impulsar algún transporte sostenible.

Guinda ha comentado que de las debilidades de PlaZa ya ha tenido ocasión de hablar con el nuevo titular de Obras Públicas, Rafael Fernández de Alarcón, a quien remitirá este estudio y con quien prevé reunirse a finales de febrero.