EMPRESAS PÚBLICAS

"Si la empresa pública gana dinero, la critican; si tiene beneficios, hay que cerrarla. Hay mucha demagogia"

El consejero de Agricultura, Gonzalo Arguilé, defiende la gestión y el trabajo de Sirasa, que cumple en noviembre diez años.

Sirasa cumple diez años y para celebrarlo la empresa pública adscrita a la consejería de Agricultura que dirige Gonzalo Arguilé ha preparado una jornada que, con el título 'Regadío, clave para el desarrollo', abordará durante los días 29 de octubre, 11 de noviembre y 25 de ese mismo mes los principales retos del regadío, la mejora de la eficiencia y el futuro del riego. La ganadería también tendrá su jornada en el mes de enero, pero la fecha está todavía por cerrar, y se celebrarán varias reuniones con sectores con los que trabaja como las denominaciones de origen, los regantes o la sanidad animal.


Todos estos actos fueron presentados ayer por el consejero de Agricultura que aprovechó la convocatoria para mostrar su defensa a ultranza de las empresas públicas y responder, con cifras y datos, a las voces críticas contra estas sociedades.


"Yo creo en las empresas públicas bien gestionadas. Ojalá las joyas de la corona -en referencia a Telefónica, Endesa y algunas entidades financieras- continuaran siéndolo, porque los consumidores estaríamos mucho más felices", dijo. El consejero insistió en su defensa de que "lo público debe intervenir en lo económico" y calificó de demagogos a aquellos que "critican a la empresa pública si gana dinero, pero si lo pierde dicen que hay que cerrarla".


"Para presumir"


Para Arguilé, dichas sociedades tienen que tener beneficios tanto para no contribuir a engordar el déficit de las arcas públicas como para tener la suficiente capitalización para no reclamar fondos cuando tienen que realizar inversiones.


Tras un detallado repaso por las actividades realizadas por Sirasa desde su creación en noviembre de 2000, el consejero recordó que la "buena gestión" realizada por la empresa adscrita a su departamento ha sido reconocida con el sello de calidad EFQM 500 Plus, una distinción que solo tiene otra empresa aragonesa, Ibercaja. "Y eso es para presumir", dijo.


Arguilé defendió la gestión de Sirasa con datos. Recordó que aquella empresa que nació hace una década con 35 empleados, una oficina, que daba dos servicios y facturaba 1,85 millones de euros, es ahora una sociedad con 249 trabajadores, tres oficinas, cinco centros logísticos, ofrece 15 servicios y factura 61,8 millones de euros. "Y ha cerrado todas sus anualidades con saldo positivo", puntualizó el consejero.