Emilio Botín: "No hemos cerrado el grifo"

El presidente del Santander, Emilio Botín, consideró este jueves que "el grifo" del crédito no se ha cerrado en España, al tiempo que valoró las medidas anticrisis tomadas por el Ejecutivo para reactivar el sistema financiero y se comprometió a intensificar su labor con el ICO para ayudar a las empresas.

Así lo manifestó Botín tras informar de que el Grupo financiero obtuvo un beneficio neto atribuido de 8.876 millones de euros en 2008, un 2,03 por ciento menos que un año antes, debido a las mayores provisiones hechas por la entidad para afrontar la crisis, que ascendieron a 10.160 millones de euros.

Al ser preguntado por las críticas que ha recibido el sector por el frenazo en la concesión de crédito, Botín dijo que el Santander "está comprometido con este país" y añadió que "nos interesa muchísimo prestar, es nuestro oficio", al tiempo que señaló que la gran mayoría de la banca continúa apostando por el crédito.

Según afirmó, los bancos y las cajas de ahorro trabajan "en la misma línea" para reactivar la economía y continuar prestando dinero, si bien es necesario explicar a la ciudadanía la situación.

En su opinión, el hecho de que se concedan menos créditos se debe a que "la demanda ha caído" y aseguró que, en el actual escenario, es el momento de "trabajar todos juntos" -Gobierno, empresas, sindicatos y el sistema financiero- para sacar adelante el país.

Sobre la crisis financiera y económica internacional, aseguró que la actividad económica "todavía atraviesa sus peores momentos" y dudó que la recuperación llegue antes de finales de 2009.

En cuanto a las medidas de apoyo al sistema financiero del Gobierno, explicó que el Santander no necesita acudir a ellas, pese a que son "muy acertadas" y explicó que "no van a costar un euro" a los contribuyentes ya que "no son ayudas, ni subvenciones", sino "mecanismos de financiación a precios de mercado".

Para Botín, las medidas han sido las adecuadas y dijo que el Santander, primer banco español por activos, se ha preparado para la crisis, que, a largo plazo supondrá mejoras internacionales en transparencia y supervisión.

Se congratuló de que España tenga bancos "sólidos y fuertes" y calificó de "preocupantes" las recapitalizaciones bancarias que realizan algunos gobiernos, ya que "distorsionan la libre competencia" al inyectar capital "en condiciones fuera de mercado".

Pidió que las participaciones públicas en el sector vuelvan "cuanto antes" a manos privadas y consideró que previsiblemente en España no se realizarán recapitalizaciones, al tiempo que reiteró que "seguro que el Gobierno tomará las medidas adecuadas".

Sobre las declaraciones del ministro de Industria, Miguel Sebastián, en las que aseguró que al Gobierno "se le está acabando la paciencia con los bancos", respondió que las respeta y mostró su confianza en que el Ejecutivo "actuará como debe" ante la crisis.

El futuro del sector pasa, en su opinión, por una mayor concentración, más supervisión y "mayor presencia del sector público", en un escenario en que los bancos se concentrarán en el negocio tradicional y el mercado exigirá mayor control de riesgos.

Esto no frenará el acceso a los prestamos de los proyectos solventes y argumentó que en el Santander "estamos autorizando el 75 por ciento de las peticiones de crédito que nos llegan".

Propuso que se mejoren las condiciones de las línea de crédito del ICO para ajustarlas al mercado y aseguró que si se incluyen estos cambios, el Santander "se comprometería a adjudicar 6.000 millones de euros, un 20% del total disponible".

De hecho, en 2008, la entidad distribuyó el 17% de la línea de Pymes del Instituto de Crédito Oficial (ICO), por encima de su cuota anual, dijo Botín, que añadió que en 2009 ya han otorgado el 42% del total de los 10.000 millones dispuestos en la Línea ICO Pymes.

Botín recordó que "es muy importante financiar a las empresas medianas", además de a las pequeñas y se mostró convencido de que se hará "porque tiene todo el sentido y es muy bueno para España".

En este sentido, Caja Madrid, la cuarta entidad financiera española, anunció hoy que refuerza su línea de financiación a empresas, comercios y autónomos, al poner a disposición de estos 6.000 millones de euros en créditos preconcedidos.

El presidente de Ibercaja, Amado Franco, pidió un mayor diálogo entre agentes políticos, económicos y sociales y afirmó que, por primera vez en los últimos veinte meses, se empiezan a "vislumbrar" signos de estabilidad en los mercados financieros.