EL FUTURO DE OPEL EN FIGUERUELAS

Los sindicatos rechazan la congelación salarial que ofrece GM hasta 2013

Piden garantías de retorno, y en las mismas condiciones, para las 350 personas que se van a ver afectadas por un expediente de extinción.

Los sindicatos con representación en General Motors España rechazan la congelación salarial que plantea la empresa hasta 2013 y piden garantías de retorno, y en las mismas condiciones, para las 350 personas que se van a ver afectadas por un expediente de extinción.


Las secciones sindicales de la planta de Figueruelas (Zaragoza) se han reunido para analizar el contenido de la propuesta empresarial sobre el plan de reestructuración, que prevé 900 despidos, 350 de ellos de personal fijo (con garantía de incorporación futura con contrato de relevo) y los otros 550 de personas con contrato de relevo, y una congelación salarial durante cuatro años, hasta 2013.


Después de todas estas asambleas, el próximo lunes se reunirá la permanente del comité de empresa para elaborar una propuesta conjunta que probablemente se trasladará a la dirección el martes, 16 de febrero.


El secretario general de UGT en GM España, Pedro Bona, ha explicado que la sección sindical a la que pertenece plantea que el expediente de extinción para 350 compañeros sea, dentro de lo posible, voluntario, y que se garantice de forma efectiva su vuelta y en las mismas condiciones en las que abandonen la planta en cuanto a antigüedad, categoría y salarios.


Respecto a la negociación del convenio, ha dicho que los trabajadores no están dispuestos a permitir que las propuestas de la empresa sean "a cambio de condiciones salariales y laborales", y ha insistido en que pedir una congelación salarial hasta 2013 es "duro" y UGT no lo va a aceptar.


Por su parte, la secretaria de CC. OO., Ana Sánchez, ha explicado que Comisiones Obreras también maneja el concepto de la voluntariedad para los 350 despidos, y que exige de una forma "absolutamente clara y rotunda" una garantía de retorno y en las mismas condiciones puesto que, ha recordado, estas personas saldrán siendo fijos y volverán como relevistas.


En cuanto al convenio colectivo, la sección sindical de CC. OO. ni siquiera ha entrado a analizar la propuesta de congelación salarial, puesto que, ha añadido Sánchez, la reestructuración ya cae de forma suficiente "sobre los hombros de los trabajadores y de la administración, en concepto de desempleo", y los empleados de GM tienen derecho a un convenio digno.


José Ignacio Sainz, de Acumagme, también ha dicho que su sindicato pedirá explicaciones sobre la salida de 350 compañeros, que a su juicio debe de ser voluntaria, y sobre el plan para los otros 550 compañeros relevistas que no van a continuar en la planta.


Tampoco las propuestas empresariales sobre el convenio son aceptables para Acumagme, que no va a negociar la salida de 900 trabajadores para luego "tener congelado el salario cuatro años".


Estos tres sindicatos se han mostrado dispuestos a la negociación del plan de reestructuración de forma paralela a la del convenio colectivo.


No así CGT, OSTA y USO, que no comparten de ningún modo que la negociación del convenio colectivo se vincule a la del plan de reestructuración y a los ajustes de empleo.


Así, José Luis León, de OSTA, dice en un comunicado que su sindicato propone que no sean "sólo los trabajadores" quienes hagan sacrificios, y entiende que acceder a una negociación conjunta supone "claudicar antes de comenzar la negociación, debilitando la posición de los trabajadores".


En cuanto al plan de reestructuración pide que se reconsidere su contenido, especialmente el relacionado con los 350 despidos forzosos y, sobre el convenio, estima "inasumibles" e "inaceptables" las condiciones propuestas, que considera un "abuso" y un "retroceso severo de las condiciones laborales".


OSTA plantea la elaboración de un plan de movilizaciones si la empresa no modifica "significativamente" sus planteamientos.


Y Ángel Arbonés, de USO, también ha insistido en que la negociación debe de ser separa, porque hay que tener en cuenta quién se va y en qué condiciones, pero también hay que pensar, ha dicho, "en los que se queden".


USO ve "muchas lagunas" en las propuestas de la empresa que requieren de una explicación, entre otras cosas el proceso para la extinción de empleo de 350 compañeros o si el ahorro de costes va a ir directamente al plan de ahorro pendiente de aprobar.


CGT ya ha mostrado está mañana su rechazo "de pleno" a la propuesta de la empresa porque conlleva, en su esencia, la pérdida de 1.800 puestos de trabajo y un recorte salarial y de condiciones de trabajo "indignantes".