El grupo AN se asocia con Arrocera del Pirineo para impulsar las ventas de arroz

El grupo navarro AN -una cooperativa de segundo grado casi centeneria que opera en los mercados de cereal, frutas y verduras, avícola, porcino, fertilizantes, piensos compuestos, semillas, fitosanitarios, carburantes, repuestos agrarios y generales, y seguros- se convertirá este año, a través de su sección de arroz, en un socio más de Arrocera del Pirineo -una cooperativa aragonesa de segundo grado creada en 1995 para comercializar la producción de este cereal-.

En estos momentos se están ultimando los trámites administrativos y estatutarios necesarios para que la intercooperación de estas dos cooperativas sea una realidad antes de que finalice 2008. Dicha unión conseguirá que el grupo AN y Arrocera del Pirineo concentren el 50% de la oferta del arroz cáscara semilargo; sumen una producción media cercana a las 40.000 toneladas anuales; se impulsen las ventas de los productos elaborados y se introduzcan en distintos mercados las marcas regionales de una y otra firma. Asimismo, entre los objetivos de esta alianza figura la concentración de las compras de semillas y la extensión a Navarra de la red de experimentación de variedades que impulsa la cooperativa aragonesa.

Los detalles de esta experiencia los explicaron ayer el gerente de Arrocera del Pirineo, Juan Juny, y el técnico del grupo AN, José Luis Ibáñez, durante la celebración de en Zaragoza de las XVI Jornadas Técnicas de Arroz organizadas por la Confederación Española de Cooperativas Agrarias (CCAE). "Primero planteamos la posibilidad de crear una nueva empresa, pero finalmente optamos por que el grupo AN entrara como un socio más en Arrocera del Pirineo", explicó Juny, que insistió en que la necesidad de adaptarse a las exigencias de los mercados está en el origen de esta alianza.

"Adaptarse al mercado"

El Grupo AN comercializa anualmente 720.000 toneladas de cereales, de las que apenas 11.000 son de arroz. "Somos minoritarios en este cultivo", destacó Ibáñez, que explicó que la filosofía del potente grupo agropecuario navarro es "buscar la intercooperación" en aquellos sectores "en los que no somos líderes". Ibáñez detalló que la alianza con Arrocera del Pirineo surgió de la necesidad de dar valor añadido a las producciones de los socios y abrirse hueco en el marco. "No tenía ningún sentido estar pegándonos por el mismo arroz", insistió el técnico, que explicó que el grupo AN "puede aportar una gran fuerza a este cereal aragonés y abrirle nuevos mercados".

Ibáñez no solo defendió la intercooperación como la única salida ante las exigencias del mercado. Aprovechó también la ocasión para "reprender" al sector cooperativo y aconsejarle que deje de quejarse, deje de mirarse al ombligo y comience a hacer algo. Para empezar -recomendó- "hay que dejar a un lado los protagonismos y comenzar a juntarse".

Las cooperativas

Arrocera del Pirineo surgió en 1995 como cooperativa de segundo grado integrada por cooperativas de Alcolea, Valareña, Grañen, Sariñena, Ejea, Sádaba, Almudévar, Lanaja, Santa Anastasia, Pinsoro y Tauste. Engloba a unos 300 agricultores y produce y comercializa -según datos de la campaña 2006-2007- cerca de 23.000 toneladas de arroz. Cuenta con una marca propia -Brazal, dinstinguida con la C de Calidad- de la que produce más de 450 toneladas.

El Grupo AN tiene su origen en 1910. Integrado por 150 cooperativas que engloban a más de 23.000 agricultores y ganaderos, cerró el pasado año con una facturación de 314,5 millones de euros. Sus recursos propios alcanzan los 56,6 millones de euros.