MAYOR BANCO SUIZO

El escándalo de UBS arrastra al consejero delegado

.El escándalo de las operaciones especulativas no autorizadas que causaron un 'agujero' financiero de más de 1.500 millones en las cuentas de UBS, el mayor banco de Suiza, ha desembocado en el descabezamiento de la entidad.

El escándalo de las operaciones especulativas no autorizadas que causaron un 'agujero' financiero de más de 1.500 millones en las cuentas de UBS, el mayor banco de Suiza, ha desembocado en el descabezamiento de la entidad. El consejero delegado, Oswald Grübel, presentó ayer su dimisión para «asumir su responsabilidad» por lo sucedido al consejo de administración, que la aceptó, según anunció el banco en un comunicado en su web, en el que anuncia un «cambio de liderazgo». Le sustituirá con efecto inmediato, aunque de forma interina, Sergio P. Ermotti, hasta ahora responsable del grupo para Europa, Oriente Próximo y África.

La defenestración de Grübel -el hombre elegido en su día para dejar atrás la crisis derivada de la sobreexposición de UBS a los activos tóxicos vinculados a la burbuja inmobiliaria estadounidense- era una cuestión de tiempo. Pese a que había conseguido devolver el banco al terreno de las ganancias, los políticos suizos exigían su cabeza desde el 15 de septiembre, cuando se destapó que uno de sus corredores de bolsa de la sede de Londres, Kweko Adoboli, había causado a la entidad unas pérdidas superiores a 1.500 millones de euros mediante operaciones especulativas «no autorizadas», que volverán a situarla en números rojos en el tercer trimestre de 2011.

UBS expresó su «profunda decepción» por lo ocurrido y reiteró que colaborará con la «investigación independiente» iniciada para esclarecer los hechos. Además, garantizó las inversiones de sus clientes.

Kweko Adoboli permanece arrestado en Londres, acusado de fraude.