OPEL

El comité dice que no acordará nada si Figueruelas no sigue como está

Sin avances y profundamente decepcionados salieron ayer de la reunión con Magna el presidente y la secretaria del comité de empresa de Figueruelas, Juan Arcéiz y Ana Sánchez. "El encuentro ha sido muy largo y muy tenso. La única novedad es que Magna ha hablado por primera vez de la nueva generación del Corsa para 2013 asegurando que el tres puertas lo haría todo Eisenach y el cinco puertas se compartiría con Figueruelas", explicó Arcéiz. Una propuesta que más que una mejora es un retroceso, ya que supone volver a la primera oferta que hizo el nuevo inversor.


"Nosotros le hemos dicho a Magna que no tenía porqué deslocalizar la parte del tres puertas que hacemos aquí ni el área de Prensas correspondiente. Ellos han contestado que les resultaba más rentable, que se ahorraban 30 millones, pero no han explicado cómo", añadió, entre otras cosas, "porque no pueden", ya que su plan solo obedece al compromiso político que tienen con Alemania de salvar sus plantas para recibir los avales de 4.500 millones de euros. Aún con todo, "no vamos a ceder", remarcó Arcéiz. Su intención es escuchar hoy los cambios que Magna plantee en la nueva cita convocada en Zaragoza, pero "si no nos mantienen el statu quo, no acordaremos nada", advirtió.


Ana Sánchez corroboró que la reunión de ayer fue más de lo mismo: "Nos han vuelto a decir que para rentabilizar Eisenach hay que trasladar producción desde Figueruelas. Y nosotros les hemos dicho que no vamos a pertimir la deslocalización", indicó. En cuanto a la posición del Gobierno, Sánchez indicó que el ministro de Industria, Miguel Sebastián, reiteró a los responsables de Magna que no habría ayudas si no llegaban a acuerdos con los sindicatos: "algo que no parece afectarles mucho porque Alemania ha aprobado darles los avales que necesitan".


Según Arcéiz, "llamarnos a una nueva reunión hoy para decirnos lo mismo, no tiene sentido". "Zaragoza no es menos competitiva que Eisenach. Por lo tanto, no estamos dispuestos a consentir que se lleven producción. En sus manos está llegar hoy al acuerdo y que podamos zanjar esto. Solo tienen que decirnos que aceptan dejarnos tal y como estamos, es decir, que Figueruelas conserve el 72% del volumen global de producción de Opel y Eisenach, el 28%", exigió Pedro Bona, secretario general de UGT en Figueruelas. Desde luego, apostilló Bona, ajustando estos porcentajes proporcionalmente a la demanda existente. Este año Eisenach ha fabricado 133.000 coches y Figueruelas 333.000, proporción que piden que se mantenga en función de lo que dicte el mercado.


Para el secretario general del Metal de UGT, Luis Tejedor, "de lo de ayer se deduce que Magna tiene compromisos políticos muy firmes con Alemania y que tienen que poner Eisenach al 100% de su capacidad a costa de Figueruelas, aunque sea dejando aquí una linea congelada en 2011. Se escudan en que fabricar los coches allí es mas barato por los costes del transporte, pero no es así porque allí los salarios son un 20% o un 30% más elevados". Para el secretario del Metal de CC. OO., Salvador Salas, no queda otra que "continuar presionando", ya que "Magna tiene un fuerte compromiso político con Alemania y de ahí, no se quieren salir".


A expensas de lo que pase


Hoy se verá si Magna realmente mueve ficha o si solo persigue conseguir un acuerdo in extremis que le permita que Figueruelas también entre en el plan de ahorro de costes. Los representantes del resto de sindicatos del comité, que no fueron invitados a la reunión, recibieron a media tarde un aviso de que la comisión permanente se reuniría hoy a las 11.00. "Magna está presionando hasta el último momento y tensando la cuerda para recibir ayudas de la DGA y el Gobierno de España, pero creo que al final habrá acuerdo porque dejarnos el 15% del Corsa tres puertas tampoco les cuesta tanto", manifestó Rafael Díaz, de Acumagme. "Está claro que echarán el pulso hasta última hora porque necesitan el acuerdo de Figueruelas, pero saben también que no pueden abocar al cierre a Eisenach", precisó Santiago Arcos, de CGT. "Si no nos traen un plan de futuro, nuestra respuesta tendrá que ser contundente", avisó José Antonio Gil, de USO, mientras que José Luis León, de OSTA, se mostró sorprendido de que "Magna no diese ayer ni un solo paso".