El Banco de Valencia regresa a la Bolsa con una caída del 5,75 %

El Banco de Valencia volvió a negociarse en la Bolsa española con una caída del 5,75%, después de ser suspendida su cotización y tras reconocer que está siendo inspeccionado por el Banco de España y que necesita ser recapitalizado, aunque no especificó en qué cantidad.


A las 16.10 los títulos de la entidad valenciana, que fue adquirida en 1994 por Bancaja, integrada en Bankia, descendían un 5,7%  hasta los 0,82 euros.


Diez minutos después, la caída se acentuaba hasta los 0,81 euros, un 6,90 %.


La Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) decidió suspender la cotización de Banco de Valencia antes de la apertura de los mercados, después de que el diario El Mundo informara de que el Banco de Valencia tenía unas necesidades de capital de 600 millones de euros.


El organismo supervisor levantó la suspensión tras recibir un hecho relevante de la entidad valenciana, en el que reconocía que está a punto de concluir una "inspección ordinaria" del Banco de España y que necesita capital, aunque no podía precisar en qué cantidad.


La entidad añade en su comunicación al regulador que, no obstante, su Consejo de Administración puede elevar el capital social nominal hasta en 60 millones de euros, que pueden no ser suficientes para cubrir sus necesidades, por lo que habría que adoptar "acuerdos adicionales".


Sí reconoce que si la ampliación de capital requerida supera el 50 por ciento -el máximo autorizado por los accionistas- habría que convocar una nueva junta para "regularizar el proceso".


mismo, el conseller de Economía, Enrique Verdeguer, afirmó que se están analizando "diversas salidas" por parte del Banco de España y del Banco Financiero y de Ahorro (BFA) -matriz de Bankia-, entre ellas que sea rescatado con dinero público por parte del Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB).


Otra de las opciones es que se incorpore en el capital alguna entidad privada.


La Generalitat está en "permanente contacto" con el grupo y el Banco de España "para tratar de dar una solución lo más apropiada posible" a la situación de la entidad financiera, según el conseller, que no ha querido concretar para evitar "generar un ruido indeseado".


El conseller ha reiterado que tanto BFA-Bankia como el Banco de España están analizando "todas las salidas" para dar estabilidad a la entidad "por el bien de los depositantes, inversores e impositores".


El Banco de Valencia cuenta con un ratio de capital del 7,36 por ciento, por debajo del 8 por ciento que el Banco de España exige al resto de entidades cotizadas.


Además, la entidad valenciana podría tener importantes problemas de morosidad, con un índice cercano al 7%  por encima que la media del sector, y una exposición creciente al ladrillo, con créditos que sumarían 3.187 millones de euros, de los que 521 son morosos.