SENTENCIA EN FRANCIA

Tres años de cárcel para el 'broker' de Société Générale

Jérôme Kerviel, ex operador de mercados del banco francés, fue condenado por causar pérdidas multimillonarias a principios de 2008. Condenado a pagar 4.900 millones de euros por daños y perjuicios.

Jérôme Kerviel
Condenan a tras años al 'broker' de Société Générale
AFP

El Tribunal Correccional de París condenó a 3 años de cárcel de obligado cumplimiento y a 4.900 millones de euros de daños y perjuicios a Jérôme Kerviel, el ex operador de mercados del banco Société Générale al que causó pérdidas multimillonarias a principios de 2008.


El tribunal condenó a Kerviel a 5 años de prisión -de los que dos están exentos de cumplimiento- por abuso de confianza, falsificación e introducción fraudulenta de datos.


Además dictaminó que pague la multimillonaria indemnización al banco, por valor de las pérdidas ocasionadas, al estimar que el "broker" fue el único culpable de falsear la información del sistema informático para tomar posiciones ficticias por montos extraordinarios.


"Los elementos aportados por la defensa no permiten deducir que Société Générale tuviera conocimiento de las actividades fraudulentas de Jérôme Kerviel", de 33 años, declaró el presidente del Tribunal, Dominique Pauthe, quien eximió al banco de cualquier responsabilidad.


Kerviel, que apelará la sentencia, "sobrepasó el límite de sus competencias al tomar posiciones especulativas de proporciones gigantescas a espaldas del banco", declaró el magistrado.


Éste recriminó además al ex operador que, desde que se conociese la noticia, se presentase ante los medios de comunicación como la "víctima" de un sistema que le alentaba a operar de esa forma, lo que laceraba la credibilidad del conjunto de las instituciones financieras.


La suma que la Justicia solicita a Kerviel representa el salario del ex operador, que ahora trabaja en una empresa de informática, durante los próximos 16.600 años.


Los abogados de Société Générale valoraron la sentencia como una "reparación moral" que confirma que se trata de una situación en la que un empleado de una empresa defrauda la confianza de quien le ha contratado.