HUELGA GENERAL

CC. OO. cree que la reforma laboral deja a los trabajadores en su "peor momento"

El sindicato considera que el Gobierno le relega a un segundo plano y olvida el diálogo social.

"Este es el peor momento para los trabajadores desde el año 78. Hemos convocado la huelga cuando el Gobierno ha tomado decisiones que agreden frontalmente nuestros derechos", manifestó ayer Felipe López, responsable del área de Industria de CC. OO. a nivel nacional, con motivo de la celebración de la cuarta asamblea de afiliados en Aragón para hablar de este tema.


Estas convocatorias responden a la "necesidad de mantener el nervio y la tensión de los trabajadores hasta el 29 de septiembre", según afirmó su homólogo en Aragón, Salvador Salas. Este dirigente sindical amparó la elección del momento de la huelga general en el "espacio mínimo exigido para explicar a conciencia los motivos" de la misma. Además, destacó los procesos modélicos que los sindicatos han llevado a cabo cuando se les ha permitido intervenir en conflictos de compañías. "En el caso de Opel", señaló a modo de ejemplo, "tuvimos un comportamiento impecable; no entendemos por qué el Gobierno ha decidido prescindir del diálogo social y señalar a los sindicatos como responsables de una situación creada por los empresarios y los que regentan la administración pública".


En el ostracismo

Felipe López compartió su desazón e inquietud por la nueva situación a la que el Gobierno pretende abocar a los sindicatos a través de medidas "recomendadas desde Europa pero en ningún caso forzadas. Si Zapatero recula en política social y nos aparta es por motivos que solo él conoce, nadie le obliga". Asimismo, señaló que el proceso de reformas del Gobierno -plan de ajuste en primera instancia y reforma laboral poco después- fue desavenido, desde un primer momento, por los agentes sociales.


El responsable de Industria en CC. OO. se refirió, desde el mismo prisma crítico, a la posible modificación de la Seguridad Social: "España ya posee una edad de jubilación superior a la media europea, no existe necesidad de aumentarla de los 65 años a los 67 y mucho menos a los 70" -última cifra planteada en Bruselas al hablar de un proceso que Zapatero defiende-. Felipe López consideró que el esquema de fuerzas actual muestra una balanza descompensada, con señalado peso para los empresarios -"que pueden acogerse a no aplicar el convenio", dijo- y un brazo sindical relegado a un segundo plano.