FINANZAS

Caja Inmaculada, pendiente del informe de Deloitte

En unos días se conocerá el informe que la consultora Deloitte ha elaborado para Caja Inmaculada (CAI). O, al menos, eso esperan los sindicatos con representación en el comité de empresa de la entidad aragonesa. A priori, el estudio debería contemplar los diferentes escenarios a los que puede enfrentarse la entidad de ahorros yendo en solitario, formando parte de un SIP (Sistema Institucional de Protección) o incluso fusionándose (a la manera tradicional, no mediante uniones 'virtuales' o 'frías') con alguna otra caja.

 

El estudio fue solicitado a mediados del mes de diciembre del pasado año, después de que tanto la plantilla de la caja como los representantes sindicales mostraran su rechazo al SIP que la CAI quería crear con Caja Rioja y la Caja Insular de Canarias. La consultora avanzó entonces que a finales de enero podía tener su propuesta diseñada.

 

En cualquier caso, y conscientes de la expectación que el anunciado informe de Deloitte ha levantado -tanto en la plantilla de la caja como en la opinión pública-, el propio presidente de la entidad, Antonio Aznar, pedía, hace dos semanas, que se recondujera la situación. Durante la presentación oficial del nuevo director general, Luis Miguel Carrasco, el presidente de la CAI explicó que, en su opinión, la cuestión se estaba planteando de manera errónea, ya que el estudio no iba a desvelar si era factible o no -de manera taxativa- seguir en solitario, o si era necesario que la CAI se uniera a otras cajas.

 

Se espera que el informe -dijo entonces Aznar- dé pautas desde un punto de vista cualitativo: si el SIP es o no viable, cuando, el informe, a buen seguro, recogerá planteamientos "graduales". "Seguramente somos viables en solitario -explicó el presidente de la CAI-, pero quizá sea mejor (o peor) ir acompañados; pero en un escenario gradual; no podemos plantearlo como una dicotomía de sí o no. No hay que plantearlo así". "Debemos reconducir las expectativas que se plantean sobre este tema", recalcó.

 

También el director general de la caja se refirió al "ejercicio de responsabilidad" asumido por la CAI al analizar todas las opciones estratégicas posibles y explorar otras vías, para ver si el SIP es "una necesidad o una oportunidad".