Botín confía en que los problemas financieros en España serán puntuales

La presidenta de Banesto, Ana Patricia Botín, afirmó que los problemas financieros que puedan producirse en España serán "puntuales y manejables", ya que las entidades españolas están mejor preparadas y están "resistiendo mejor" la crisis en comparación con otros países de su entorno.

Botín, que pronunció una conferencia en el XII Congreso Nacional de Empresa Familiar, consideró que el sistema financiero español está "mejor preparado" gracias a la política de provisiones anticíclicas impulsada desde el Banco de España, y a que las entidades centran su negocio en el cliente. Además, recordó que la crisis económica es algo "tradicional" en el ciclo económico, puesto que ya ha habido que superar otras con anterioridad.

Por ello, la presidenta de Banesto dijo ser "razonablemente optimista" respecto al futuro de España a medio plazo, si bien remarcó la existencia de cuatro grandes retos para la economía del país: el alto endeudamiento de familias y empresas, la baja productividad, el déficit exterior por cuenta corriente y los altos niveles de desempleo.

Sobre el proceso de desapalancamiento iniciado por empresas y familias, Botín subrayó que cuanto antes se ajusten los niveles de deuda y se saneen los balances antes se retomará la senda del crecimiento.

Sobre la productividad, recordó que ya no es posible realizar un ajuste macroeconómico con una devaluación de la moneda, por lo que no queda más remedio que afrontar el reto desde la propia empresa.

Botín propuso realizar un "ajuste a la alemana", es decir, tratar de producir más con menos costes, para lo que defendió un mayor uso de los avances tecnológicos en las empresas.

La presidenta de Banesto también apostó por una mayor internacionalización de la empresa española, al recordar que la corrección del déficit exterior por cuenta corriente se está produciendo por el lado de las importaciones, y no por unas mayores ventas al exterior.

Otras de las propuestas de Ana Patricia Botín fueron el impulso de sectores económicos de mayor valor añadido y la reinvención del modelo inmobiliario.