A vueltas con el ruido

Nada más conocerse las intenciones del Gobierno, todo el mundo se puso a mirar a las cajas como las principales protagonistas de los problemas. Algún banco hay también 'tocado', como podría ser Bankinter, cuyos responsables se han puestos raudos a cumplir los requisitos. Pero en el caso de las cajas, en pleno proceso de fusión muchas de ellas, el problema parece más evidente. Sin embargo, el secretario general de su patronal (CECA), José Antonio Olavarrieta, ha salido afirmando que la inmensa mayoría ya cumple ese dígito del 10%.


Buena parte de los expertos sonríen con esta afirmación, pero tras su mueca acompañan una reflexión amarga: no es bueno volver a confundir a los mercados. «Reconozcamos de una vez por todas el problema y solucionémoslo», vienen a coincidir casi todos.


En cualquier caso, lo primero es que el Gobierno deberá aprobar el decreto-ley. Dentro habrá de explicar, por ejemplo, si en las entidades nacionalizadas opta por que el Banco de España se encargue de la gestión, se nombra un administrador o entran unos consejeros públicos.


Para colmo de intranquilidades, una nueva duda surge. Todos los rumores indican que el Gobierno pondrá al final todo el dinero que las entidades necesitan para recapitalizarse, pero por ello no se exigirá a cambio un plan de saneamiento. En el documento base del decreto-ley, de momento, se explica que la entrada del FROB -por cuyo control pugnan ahora Gobierno y Banco de España- en el capital de las entidades estará condicionada precisamente a la elaboración de un plan de reestructuración. Pero nada se dice de un plan de saneamiento. Algo que no ha sido bien acogido por los mercados.


El Gobierno aún está a tiempo de corregirlo, aunque muchos también creen que con la exigencia de capital básico tan alta será suficiente, sin necesidad de tocar el saneamiento de los balances. Esta prioridad ya se está dejando notar. En lugar de seguir destinando el dinero a cubrir solvencias, los fondos van directamente al 'core capital'. ¿No se estará desvistiendo a un santo para vestir a otro?