CGT ha interpuesto una demanda contra General Motors España por mantener en nómina a dos altos cargos sindicales -Luis Tejedor, secretario general de la Federación del Metal en UGT Aragón, y Ramón Górriz, secretario de Acción Sindical Confederal de CC. OO.- que fueron miembros del comité de Figueruelas hace 8 y 17 años respectivamente, pero "cuya vinculación con la empresa no está clara desde hace tiempo", según este sindicato.

"No se si será ilegal, eso lo tendrá que decir el juez, pero sí es inmoral y un quebranto del principio de igualdad que la empresa esté pidiendo sacrificios a todos los trabajadores y mantenga en nómina, de forma altruista como los bonus a directivos, a dos líderes sindicales que se dedican a trabajar para sus respectivos sindicatos", criticó César Yagües, secretario de la sección sindical de CGT, que denuncia el "trato de favor" de la multinacional hacia los dos sindicatos mayoritarios. CGT argumenta también en la demanda que GM, en lugar de aplicar el Estatuto de los Trabajadores que contempla la excedencia por responsabilidad sindical, prefiera llegar a "acuerdos verbales con Górriz y Tejedor y mantenerles el permiso retribuido de libre disposición desde hace 17 años y 8, respectivamente, mientras procede, a su vez, a recortar los permisos del resto de trabajadores". En opinión de CGT, sorprende que "estos costes altruistas no hayan sido recortados lo primero ante tanta crisis".

Yagües explicó que se dieron cuenta de este agravio comparativo a través de unos documentos en los que se confirmaba que Ramón Górriz y Luis Tejedor habían sido incluidos por GM en los listados de trabajadores de Figueruelas afectados por ERE en 2009: "Nada sorprendente si no fuera porque ambos ostentan cargos de representación sindical ajena a GM, estatal uno y autonómico el otro, liberados sindicales desde hace 17 y 8 años, respectivamente", añadió el representantes de CGT. Un sindicato que denuncia también que Górriz está adscrito a un departamento de GM, 'Asignaciones Especiales', del que "no había tenido conocimiento hasta la fecha".

Por su parte, Luis Tejedor aseguró no haber ocultado nunca su situación a nadie, ni siquiera a los de la CGT: "Nunca he dejado de ser trabajador de GM. Entré en octubre del 82 y soy especialista C desde hace 26 años. En todos los ERE de suspensión he ido al paro como todo lo demás". No obstante, reconoció estar liberado y ocupar un cargo sindical desde hace doce años: "los cuatro primeros años, desde 1998 hasta 2002, combiné la representación en GM con mi cargo de secretario general en la Federación del Metal, pero llevo ocho años dedicándome en exclusiva a mi cargo en UGT, pero cuando me despedí del comité ya dije que iba a mantener el salario de Opel", dijo, e insistió en que no cobraba nada del sindicato.

Por el contrario, Ramón Górriz, de CC. OO. eludió hacer ningún tipo de manifestación: "No entro en estos temas", señaló. En su lugar habló Salvador Salas, secretario general de la Federación d Industria en CC.OO. Aragón, que calificó de "inmoral y reality show" la presentación de esta demanda por parte de CGT: "Me fastidia que unos tipos que solo hacen demagogia barata intenten ser los adalides de la pureza. Nos acusan de que comemos en la mesa del patrón, pero ellos también tienen un liberado por la sección sindical, porque cuando tienes más del 10% de representación te corresponde". A su juicio, no vale decir que "unos comen más y otros menos: los sindicatos tenemos carencias y los recursos hay que sacarlos de donde sea. Así que me parece perfectamente legítimo", dijo. Por último, tanto Salas como Tejedor aludieron a que uno de los miembros de CGT, que suscribe la demanda, Andrés Pejenaute, secretario de Acción Sindical de CGT Metal Aragón, también fue "liberado sindical y Filtros Mann le pagaba entonces cuando trabajaba de sindicalista para CC. OO."