Una biotecnológica aragonesa que planta cara a la enfermedad de Alzheimer
La aragonesa Bioclonal, ‘spin off’ de Bioknostic, pone a disposición de grandes farmacéuticas su plataforma tecnológica propia, RedMabs.
«Vivimos en una revolución tecnológica. En los últimos años, hemos vivido más avances médicos que en todo el siglo pasado. No obstante, muchas enfermedades, como el cáncer o el Alzheimer, siguen sin tener cura». Ante esta situación, afirman los profesionales de la empresa zaragozana Bioclonal, «no hay duda de que el futuro pasa por la biotecnología». Por ello, proclaman, «queremos ser parte de la solución».
«La idea surge de nuestro ‘family office’, 100% de capital privado, tras una idea científica de Javier Garfella», afirma Paula Garfella, directora general de una compañía que surge como ‘spin off’ de Bioknostic, que lleva 26 años en la brecha y que hoy es un ‘holding’ empresarial que invierte en proyectos de biotecnología, ‘start up’ e ideas nacientes. Bioclonal, precisa, surgió como una idea de negocio a mediados de 2020, en plena pandemia, siendo conscientes de la puesta en valor que se le dio al cuidado de la salud y la consecuente necesidad de apostar más por la I+D (Investigación y Desarrollo).
Paula Garfella y su padre Javier, pionero en la investigación de anticuerpos monoclonales para diagnóstico y terapia humana, constituyeron oficialmente Bioclonal el 19 de octubre de 2022. Desde entonces han formado un equipo en el que ya están ocho personas para impulsar una compañía que quiere plantar cara al Alzheimer antes de que se produzcan los primeros síntomas y que tiene vocación internacional.
La investigación, desarrollo y mejora de los anticuerpos monoclonales (proteínas del sistema inmunitario que detectan cualquier agente externo al individuo y promueven su eliminación) son los campos de acción de especialización de Bioclonal, «lo que se traduce en terapias humanas más efectivas», apuntan desde la firma. Con «un enfoque totalmente disruptivo», añaden, el primer programa de I+D de esta ‘biotech’ «supone una novedosa forma de atacar el mecanismo molecular fundamental que desencadena el Alzheimer, el tipo de demencia más común, que afecta a 55 millones de personas en todo el mundo».
Hasta ahora, explican fuentes de Bioclonal, los tratamientos existentes para luchar contra este enfermedad se centran en tratamientos neurobiológicos (consecuencias y síntomas) producidos por la enfermedad, pero no el mecanismo raíz causante de los mismos. Lo novedoso de la empresa aragonesa, inciden, es que ha identificado un biomarcador de la enfermedad que ayudará a detectar la enfermedad antes de la aparición de los síntomas.
Herramienta «imbatible»
Además de poder actuar de modo preventivo, la eliminación de este biomarcador a través de un anticuerpo (‘First in Class’), desarrollado con tecnología propia, «supondrá una cura en cualquier estadio de la enfermedad», aseguran desde Bioclonal antes de recalcar que este desarrollo tendrá lugar gracias a su innovación en el campo de los anticuerpos monoclonales, que genera una herramienta «imbatible» y aplicable a esta y muchas otras enfermedades.
«Comenzando por el Alzheimer», concluyen profesionales de Bioclonal, esta empresa «utiliza y pone a disposición de grandes compañías farmaceúticas de todo el mundo su plataforma tecnológica propia, RedMabs, para la investigación y mejora de tratamientos biológicos en distintas áreas terapéuticas como las enfermedades neurodegenerativas, la oncología, la virología y la oftalmología».
La ‘spin off’ de Bioknostic, según explica Paula Garfella, prevé contar con su primer producto, ya con resultados de su investigación, para el verano de 2024. De momento se instalará en una nueva sede en el polígono Empresarium de Zaragoza en mayo y, en el marco de esa apuesta por el negocio internacional, en el que se prevé llegar a acuerdos con grandes farmacéuticas, trabaja ya con el impulso de uno de los ‘fichajes’ de la firma, María Eugenia Díaz, que tiene experiencia en mercados globales.
