Más de 100 personas trabajan ya en el complejo alimentario que Bon Área construye en Épila

La compañía prevé ampliar el proyecto para incluir instalaciones de hidrógeno y biogás y naves de congelación.

La nave de talleres de 14.000 metros cuadrados es la primera edificación de Bon Àrea
La nave de talleres de 14.000 metros cuadrados es la primera edificación de Bon Àrea
Bon Àrea

El complejo agroalimentario que Bon Área está construyendo en Épila (Zaragoza) comienza ya a tener actividad. Más de 100 personas -además de los operarios implicados en las obras- trabajan ya en el complejo, en el que la Corporación Alimentaria Guissona ha invertido hasta el momento 170 millones de euros de los 400 millones previstos.

Así lo detallaron ayer desde Bon Área Corporación, que explicó que durante el pasado año invirtió 148 millones, un 14% más respecto el año 2021. De esta cantidad, un total de 60 millones tuvieron como destino, destacó la empresa, las obras del nuevo centro alimentario que están levantando en Épila.

En este complejo, que se inició en 2019, ya está construida la nave de mantenimiento, la de frutos secos y la de logística, una infraestructura de 22.000 metros cuadrados en la que ya está en funcionamiento el proceso de cross-docking, un tipo de preparación de pedidos en el que la mercancía se distribuye directamente sin pasar por un periodo de almacenamiento. Esto supone que cada día lleguen hasta la localidad zaragozana una decena de tráilers para ser cargados con los pedidos preparados para ser expedidos con camiones de distribución a unas 100 tiendas repartidas por Aragón, Navarra, La Rioja.

También esta operativo el lavadero de cajas, una instalación dimensionada para limpiar hasta 400.000 cajas al día y almacenar más de un millón, entre las sucias y las listas para su uso, así como la nueva gasolinera, que cuenta con diez puntos de repostaje para coches y camiones, doce boxes de lavado de coches, dos para camiones y ocho para aspiraciones y dos puestos de carga eléctrica.

La empresa señaló este jueves en una nota de prensa que, además de estas instalaciones, su intención es "ampliar dichos proyectos para dar cabida a nuevas fuentes de energía, tales como pueden ser el hidrógeno, por el que Aragón está haciendo una fuerte apuesta, o el biogás, que nos permitiría una mayor circularidad con el aprovechamiento de subproductos y residuos".

Sede corporativa

Pero además, y tras la experiencia de la pandemia y de los problemas de suministros derivados de los conflictos internacionales, la firma catalana se ha planteado la posibilidad de poder ampliar la capacidad de almacenaje y regulación de la producción mediante la construcción de nuevas naves de congelación. Y además, previendo un gran crecimiento de la plataforma en el futuro, considera también necesario incorporar un edificio de oficinas como sede corporativa de la misma.

Bon Área Corporación cerró el pasado año con una facturación de 2.822 millones de euros, un 25,4% más respecto a 2021, unas cifras marcadas en buena parte, reconoció la compañía, por los efectos de la elevada inflación general de los productos y en especial de los carburantes suministrados.

Su beneficio neto fue de 69,36 millones de euros, un 6% superior al ejercicio anterior.

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión