economía

"La apuesta logística de Panattoni por Zaragoza no tiene techo"

Gustavo Cardozo, director general de Panattoni en España y Portugal, está al frente de una de las principales promotoras de naves de Europa, que ha invertido 50 millones de euros en la construcción de cuatro instalaciones en Plaza.

Cardozo es venezolano de origen y ha desarrollado su carrera en España, especializándose en la promoción de naves industriales.
Cardozo es venezolano de origen y ha desarrollado su carrera en España, especializándose en la promoción de naves industriales.
Francisco Jiménez

Han promovido cuatros naves en Plaza que suman 100.000 m2 y sopesan una XXL. ¿Su apuesta logística por Zaragoza tiene techo?

No, no tiene techo. Una buena parte del desarrollo que vamos a tener en la Península se va a focalizar en Zaragoza. Tiene todos los componentes para atraer actividad logística, como la ubicación, infraestructuras, buen nodo de comunicaciones, suelo disponible y mano de obra cualificada. Además, hay mucha colaboración de la Administración para lanzar grandes proyectos en tiempos reducidos.

La mayor nave la promueve su competencia, Montepino, en Malpica con más de 141.000 m2. ¿Veremos instalaciones de este tamaño de Panattoni en Aragón?

No le tememos al tamaño. De hecho, en el norte y el este de Europa las naves más grandes las hemos desarrollando nosotros. Y, obviamente, si aquí tenemos posibilidad de captar suelo de grandes superficies, como estamos haciendo ahora, para nosotros no hay límites de tamaño. El cielo es nuestro límite, queremos hacer muchas cosas, estamos capacitados y tenemos el equipo con mayor experiencia en España.

Ampliación de Plaza, recalificación del PTR y la Universidad Laboral y otra plataforma en Zuera. ¿Existe demanda para tanto suelo?

Hoy día, sí y mañana, también. El mapa logístico europeo está cambiando y Zaragoza tiene gran potencial para atraer también actividad industrial. Estamos viendo cómo muchas empresas que se fueron a China están volviendo y qué mejor sitio que España, donde los costes operativos son inferiores a otros países europeos. Y también los energéticos.

¿La apuesta de Aragón por las renovables supone una ventaja competitiva para atraer empresas?

Sí. Tener energía limpia próxima es un gran aliciente en la toma de decisiones de muchas empresas, sobre todo internacionales y con gran concienciación ambiental.

¿El comercio electrónico explica el bum logístico en las grandes capitales?

No, es un añadido. En los años anteriores ha tenido un peso significativo en el crecimiento, pero en 2022 muy pocas operaciones estuvieron relacionadas con el comercio electrónico y fue un año récord. Esto quiere decir que la mentalidad está cambiando en España, viene mucha actividad logística e industrial y también está la reestructuración de las cadenas de suministro. El ‘just in time’ ha quedado un poco apartado con las crisis de suministro.

¿Eso puede compensar la ralentización de la economía?

Sí, pero España ha sido uno de los países en los que menos ha impactado la inflación y los problemas energéticos. Los medidores económicos son positivos y eso da confianza a empresas internacionales a la hora de invertir en España. Ha sabido reinventarse, invirtió mucho en infraestructuras hace dos décadas y hoy está ayudando a traer empresas. Esa inversión cuestionada está dando hoy sus frutos.

¿Hasta cuándo podemos seguir atrayendo inversión logística?

Siempre que haya políticas fiscales que lo ayuden. España lo tiene todo y solo hacen falta políticas económicas que incentiven la inversión. Y con eso no digo que se les regale nada.

Amazon liga ahora sus proyectos con renovables. ¿Veremos polígonos logísticos con parques solares y eólicos?

Sí, sí. Va a ser algo normal. La guerra en Ucrania nos ha hecho abrir los ojos sobre la dependencia energética. Los polígonos logísticos son el lugar para ese tipo de energía, porque no tiene impacto visual al lado de un polígono y tener el consumo a pie de instalaciones o en las cubiertas es un factor competitivo.

¿Hasta qué punto el alza del coste de materiales ha impactado en el sector?

Construir una nave como la que acabamos de estrenar en Plaza cuesta ahora casi el doble que hace cuatro años. El impacto ha sido brutal, porque hemos tenido que reducir nuestros márgenes, sobre todo en el último año. Las rentas son las que son, las tasas de capitalización van en sentido a lo que queremos y los costes financieros han tenido un impacto muy negativo en el último año. Se han triplicado.

¿Qué peso tiene la capital aragonesa dentro del negocio nacional de Panattoni?

En lo construido hasta ahora, casi un 20% y podría incrementarse en los próximos años. Y esperamos que así sea.

¿Cuál es el verdadero negocio, promover y alquilar, construir a la medida de un cliente o vender activos a fondos?

Somos promotores. Nos da igual si las naves son para alquiler o venta, si son logísticas o industriales. Tenemos el abanico más amplio en nuestro sector. No nos cerramos a nada si tenemos un cliente.

Las últimas naves logísticas son ‘cross-dock’, sin almacenamiento. ¿Es el futuro?

No, siempre han existido. Es una tipología que llevo años haciendo, que normalmente están cerca de las grandes poblaciones. Es un tipo de nave a la que llega el producto antes de tocar la puerta del destinatario.

¿La autopista ferroviaria con el puerto de Algeciras puede convertir Plaza en la puerta de Europa como dicen los políticos?

Creo que sí. Las infraestructuras van a ayudar muchísimo, aunque habrá que crear mercado y costumbres. El ferrocarril suma en la reducción de la huella del carbono, aunque sea menos flexible que el camión. Y como está construida la línea, fenomenal.

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