Agricultura
Bardenas inicia una campaña de riegos "complicada y con más restricciones"
Las escasas reservas de Yesa, en prealerta por sequía, obligan a adelantar casi cuatro meses el reparto de cupos en el sistema de riego
Comienza la nueva campaña de riego en el sistema de Bardenas. Se iniciará de forma progresiva a partir del próximo lunes, 6 de marzo y llegará, de nuevo y como ya sucedió el pasado año, con restricciones, con reparto de cupos prematuramente y "muy pendiente de la meteorología", anunció ayer la Comunidad de Regantes, en la que se riegan 83.000 hectáreas (el 80% situadas en Aragón y el resto en Navarra) que se reparten por 60 poblaciones y abastece además a la ciudad de Zaragoza .
La sequía, que tantas complicaciones supuso durante la campaña de 2022, no da tregua y mantiene bajo mínimos el embalse de Yesa que contiene actualmente 264 Hm3 (59% del volumen bruto). Este nivel, recordaron ayer desde la comunidad de regantes, es el octavo más bajo de los 63 años de la historia de Bardenas, lo que lo sitúa en situación de prealerta por sequía según los umbrales que establece la Confederación Hidrográfica del Ebro. "Por esta circunstancia nos hemos visto obligado, entre otras medidas, a adelantar en unos cuatro meses el habitual reparto de dotaciones", explicaron desde la comunidad de riego que preside José María Vinué, que insistió en que estos cupos que se establecen cada año de acuerdo a las normas de reparto de la comunidad general "se han convertido en una herramienta fundamental para afrontar la sucesión de campañas tan secas y el déficit estructural que viene padeciendo este sistema".
Y es que, las dos últimas campañas en Bardenas han sido «las más secas de la historia, con aportaciones mínimas desde marzo hasta noviembre», detallaron. Prueba de ello es que el nivel del embalse de Yesa llegó incluso a situarse en el umbral de emergencia por sequía desde el 20 de julio hasta el pasado 10 de enero, "provocando pérdidas de cosecha en cultivos tardíos de alto valor añadido", advirtieron los regantes.
En estos momentos, la reserva actual supone una dotación de riego de 2.040 m3/Ha, frente a los 3.244 m3/Ha del año pasado y los 3.964 m3/Ha de 2021. Unas cifras muy alejadas de los regadíos consolidados que se sitúan en torno a los 9.000 m3/Ha. Según los datos de este sistema de riego, lo que llevamos de año hidrológico se está caracterizando por aportaciones muy por debajo de la media. Concretamente, desde el 1 de octubre hasta el 3 de marzo han entrado al embalse de Yesa 344 Hm3 frente al promedio de los últimos 10 años que se sitúa en 604 Hm3. Esta circunstancia, señalaron desde Bardenas, supone hasta la fecha el undécimo peor año hidrológico de los 63 años.
Tampoco son muy halagüeñas las expectativas en lo que a nieve se refiere. Los cálculos de esta comunidad de riegos hablaban, con fecha 27 de marzo, de una reserva «teórica» de 216 Hm3 en la cuenca del río Aragón. Aunque la cifra es superior a la media por estas fechas, los responsables de Bardenas insistieron ayer en que, no obstante, "se vigila con cautela" la evolución de la reserva de nieve ya que están convencidos de que en la práctica y dependiendo de múltiples factores, «no va a ser suficiente para llenar el embalse».
Por eso, ayer, como han hecho el reiteradas ocasiones, la junta de Gobierno de Bardenas con su presidente al frente lamentó que mientras la obra del recrecimiento de Yesa no esté terminada, "la campaña de riego nuevamente dependerá de la meteorología y de la evolución de la reserva de la nieve".
