El Gobierno de Aragón se ha propuesto que la Comunidad sea la primera región española en la que la fertilización de todos los cultivos no se realiza con productos minerales sino orgánicos, procedentes del tratamiento de los purines. Para ello contará con la experiencia y el conocimiento adquirido por el grupo turolense Térvalis tras años de investigación e inversión en I+D. La compañía que preside Generoso Martín cederá “buena parte de sus patentes” en esta materia al Gobierno aragonés para que este, junto con el grupo empresarial y la comunidad científica impulse la trasferencia de ese conocimiento y su aplicación práctica al sector agrario “de norte a sur de la Comunidad y de este a oeste”.

Lo ha anunciado este martes el presidente del Ejecutivo autónomo, Javier Lambán, momentos antes de participar en la clausura del I Encuentro Renowagro, organizado por Térvalis y Fertinagro Biotech, que ha reunido en Zaragoza a expertos mundiales y en el que han participado más de 800 personas.

“Para impulsar ese proceso de transferencia al que tenemos que dedicarnos mucho en los próximos meses, tenemos la predisposición, digna de ser agradecida y ser reconocida, de Térvalis de trasferir al Gobierno de Aragón buena parte de las patentes que ha conseguido con muchos años de trabajo y de dinero dedicado a la investigación, para que entre todos y cuanto antes podamos alcanzar ese logro de la sustitución de utilización fertilización mineral por la orgánica”, ha destacado Lambán.

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No ha querido el presidente avanzar plazos o costes porque, ha dicho, “lo que está clara es la decisión y el compromiso adquirido” y ha matizado que antes de hablar de esas cuestiones será preciso también que se vaya produciendo una “innovación social en lo que a gestión de los fertilizantes se refiere. Se refería así Lambán al otro de los compromisos surgidos en el marco de este encuentro, y que pone de manifiesto la necesidad de colaboración entre los distintos actores. “Hasta ahora cada actor ha visto la realidad desde su exclusivo prisma y ahora se trata de que todos dejen atrás esas visiones particulares, se sienten a la misma mesa y comprueben que sus intereses no solo son compatibles sino necesariamente complementarios y que agricultores y ganaderos pueden encontrar formulas de colaboración que les pueden favorecer a todos”, ha dicho Lambán. Un paso que ya se está dando con la puesta de un proyecto piloto en la comarca de las Cinco Villas en el que participan Fertinagro y Vall Companys, el Gobierno de Aragón, Cooperativas Agroalimentarias y agrupaciones comarcales del sector. “Será un escaparate magnífico para que el resto de las comarcas elimine reticencias y advierta que entrando en este camino hay más que ganancias para todos”, ha matizado el presidente.

Hay un tercer compromiso. Lambán ha insistido en la necesidad de proceder a una reforma normativa para eliminar las limitaciones que impone Bruselas al uso de los fertilizantes orgánicos. “Las directivas europeas están demasiado condicionadas por representantes de países del norte de Europa que tienen unos suelos con mucha materia orgánica y, por tanto, no interesados a favorecer la fertilización orgánica que es a lo que nosotros aspiramos porque justamente nuestros suelos son lo contrario, carecen de materia orgánica, y hay un cambio de prioridades si se ven las cosas desde el norte o desde el sur”, ha señalado Lambán, que ha insistido que lo que Aragón tiene que hacer es hacer ver a los legisladores europeos que no se pueden hacer las leyes solo a medida de los países del norte sino que también para que “se respeten las peculiaridades del sur y nos permitan desarrollar nuestras especificidades”.

Para Lambán, el congreso organizado por el grupo turolense y que se ha celebrado durante dos jornadas en Zaragoza, “es un hito en la historia de la agroalimentación aragonesa”, porque en él se han establecido las bases para ese objetivo que se propone Aragón de ser la primera que alcance la meta de sustituir la fertilización mineral por la orgánica. “Eso es un cambio copernicano, da solución a un problema que tienen el sector primario, y la ganadería intensiva fundamentalmente, en cuanto a los purines como factor contaminante y su conversión como factor enriquecedor de la agricultura y favorece también al sector agrario porque le va a permitir mejorar la calidad y la fertilidad de los suelos y reducir los costes que supone la fertilización”, ha puntualizado.

El camino para lograr alimentos sanos, más sostenibles y asequibles

Recordaba ayer el director de planificación de Fertinagro Biotech, Sergio Atarés, que el reto del sector agroalimentario es lograr alimentos sanos, más sostenibles y asequibles. Un objetivo para el que ha abierto camino, señaló, el I Encuentro Internacional Renowagro, clausurado este martes en Zaragoza y en el que expertos de todo el mundo y representantes institucionales y empresariales han abordado durante dos jornadas los desafíos y oportunidades a los que se enfrenta el sector en el marco de la era de la sostenibilidad.

"El propósito del encuentro era compartir retos, soluciones y compromisos y en este sentido ha sido todo un éxito, porque los ponentes, y especialmente las autoridades que han participado han expresado esos retos y preocupaciones de forma contundente", ha destacado Atarés.

El representantes de Fertinagro, del grupo Térvalis, ha señalado además que el encuentro ha puesto sobre la mesa las soluciones más factibles para que puedan ser utilizadas a corto plazo. Y ha recordado que en ese marco, el grupo turolense y el Gobierno de Aragón han sellado compromisos "para que Aragón, como base, y España y Europa puedan acelerar el camino hacia una transición justa de la alimentación".

Unos compromisos, ha reconocido Atarés, que se llevarán a cabo tan pronto como sea posible en el marco regulatorio en el que se mueven. «Y eso no lo marcamos nosotros», matizó. Sin embargo, mostró su confianza en las palabras pronunciadas momentos antes por el secretario de Estado de Agricultura, Fernando Miranda, que también participó en la cita, que explico que en el mes de diciembre se realizará una puesta en común de una nueva normativa sobre nutrición sostenible de suelos. «Esa norma aportará mucha visibilidad en lo que ya podemos hacer a corto plazo», destacó el director de Planificación de Fertinagro Biotech, que recordó que en «es ahí» donde Térvalis y el Gobierno de Aragón ya tienen soluciones a corto plazo.

El encuentro, en el que han participado expertos de todo el mundo, ha servido para intercambiar experiencias, pero también «para tomar nota» de innovadores proyectos que se aplican en otros lugares. Eso sí, ha recordado Atarés, teniendo en cuenta siempre que la agricultura y la alimentación depende mucho del entorno, tiene elementos globales pero es local. "Aquí no hay gacelas», insistió, pero reconoció que hay «muy buenas ideas que podemos cristalizar en nuestro entorno". Entre ellas destacó la posibilidad de soluciones en las que se relaciona los subproductos vegetales con las deyecciones ganaderas.