economía
El primer año sin 'paguilla' para los pensionistas, pero con una subida del 8,5%
La última reforma terminó con el ajuste de las prestaciones al IPC que se abonaba en forma de pago en enero.
Noviembre era hasta este año el mes del que los pensionistas estaban atentos para saber qué 'paguilla' cobrarían entre enero y febrero del siguiente. Se trataba de una compensación en el caso de que los precios subieran por encima del incremento que tuvieran pactado ese año. Ese pequeño extra ya no se percibirá nunca más.
La última reforma del sistema de pensiones, la primera parte de una mayor, ha eliminado este ajuste al volver a vincular la actualización de las prestaciones al Índice de Precios al Consumo (IPC), después de que en las anteriores reformas dejaran de subir en función del coste de la vida. Ahora el incremento se calculará en función de la inflación media, un sistema bien recibido tras años alejadas del IPC, pero criticado por algunos colectivos de pensionistas porque puede quedar en algunos ejercicios por debajo del real, y que habrá que calcular cada año tomando como referencia los doce meses anteriores, también contados desde noviembre. Este año, en el que se han batido récords de inflación, llegando a los dos dígitos, el Gobierno ya ha anunciado que la subida será del 8,5%.
El porcentaje anunciado por el Gobierno se acercaría, de momento, a ese IPC medio. Si se toman como referencia los datos de la subida de los precios interanual que se ha registrado hasta ahora, de octubre de 2022 a octubre de 2021, la media que resulta es de 8,8%. Serían tres décimas más, pero la inflación sigue en máximos, con tendencia a la baja, con un dato avanzado en octubre del 7,3%, después de haber pasado el verano rondando el 10%.
Desde organizaciones de pensionistas como la Coordinadora para la Defensa del Sistema Público de Pensiones (COESPE) vienen denunciando la pérdida de poder adquisitivo de los pensionistas en los últimos años. "En 2021 se ha producido una pérdida de poder adquisitivo en las pensiones del 3% y en lo que va del año 2022 la subida media de los salarios ha sido del 2,4% y de las pensiones del 2,5%", denunciaron en la manifestación convocada a nivel nacional el pasado mes de octubre, a la que acudieron pensionistas aragoneses de los que se concentran los lunes en la plaza del Pilar. El colectivo defiende que la revalorización de las pensiones se haga "en función del incremento del IPC acumulado anual" y no de uno medio.
Entre las reivindicaciones de la plataforma se encuentra además que la pensión mínima se equipare con el salario mínimo (actualmente situado en los 1.000 euros al mes) y que este aumente hasta suponer el 60% del salario medio.
¿Cuánto subirán las pensiones a partir de 2023?
Este año se ha anunciado con antelación la subida de las pensiones del siguiente ejercicio. En 2023 el alza será de un 8,5%. En Aragón, hay 307.256 personas que cobran una pensión, con una media de 1.156 euros al mes, según los datos de octubre de la Seguridad Social. De media, la prestación pasará en enero de 1.156 a unos 1.250 euros. El 19% del total, alrededor de 60.600 personas, perciben además un complemento por tener una pensión mínima.
La cuantía varía en función del tipo de pensión, siendo las de mayor importe y más numerosas las de jubilación. En la comunidad 201.574 aragoneses cobran una prestación por jubilación, cuya cuantía media se situó en 1.319,95 euros de media en el mes pasado, que pasará a 1.431,95 con el incremento previsto.
Le siguen en número las pensiones de viudedad, con 73.625 prestaciones por un importe medio de 821 euros al mes, que subirán a unos 890 euros. Le siguen las pensiones tras haber sido reconocida una incapacidad permanente, con 21.780 casos y 1.095,52 euros al mes de media (1.188 euros) y las de orfandad, 9.431 con 452,65 euros al mes (490,65 euros). Existe un último tipo de pensión, la llamada en favor de familiares, que perciben 846 aragoneses con 683 euros al mes y llegará a unos 741 euros con la subida.
