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El Manubles luce sus productos en su VI Feria de la Fruta a pesar del fuego y el granizo: "No queda otra que seguir adelante"

Varios puestos con género local del valle conviven con muestras artesanas de la comarca en una cita que acaba este sábado.

Feria de la Fruta del Valle del Manubles.
Feria de la Fruta del Valle del Manubles.
Jesús Macipe

La Feria de la Fruta del Valle del Manubles, que se inauguró el viernes por la mañana y se clausura este mediodía, es, por sexta edición, la muestra de unión, apoyo y buena sintonía que existe en la ribera del río. En esta ocasión, la localidad anfitriona ha sido Berdejo, en la cabecera de este afluente del Jalón donde se ha desarrollado una intensa programación de actividades lúdicas, turísticas y formativas en combinación con una muestra de 30 expositores, buena parte de ellos productores de la zona o de la comarca de la Comunidad de Calatayud. Y algunos directamente afectados tanto por el incendio de julio como de la tormenta de pedrisco de este pasado lunes.

"Tenemos aquí tomates de pera y rosa, pimiento rojo y queríamos venir con calabacines, pero: primero se nos quemó una hectárea y después volvimos a plantar y lo arrasó el granizo", reconocían Irina Agrigoroaei y Ángel Uriel, ambos pareja y productores de la localidad de Moros. Al hablar de su explotación lo siguen haciendo con la ilusión que infunden en sus miradas y en la sonrisa: "No queda otra que seguir adelante, no nos vamos a echar a llorar", sostienen. En total cuentan con tres hectáreas en las que también cultivan coliflor y brócoli, muchas de ellas con dirección a Madrid, aunque también venden desde el pueblo.

De la fruta al champú sólido

A pocos pasos estaban los responsables de Frutas Villalengua, central asentada en el pueblo que le da nombre y a la que acuden muchos de los productores. "Las ferias sirven para dar a conocer el producto, para que la gente lo vea de primera mano. Aquí hay un buen ambiente, nos conocemos todos y eso lo hace todavía mejor", explicaba Ana Ledesma. En las cajas que flanqueaban su puesto, ciruelas y, sobre todo, manzanas: verde doncella, fuji y reineta. "Escribo los nombres de los productores que nos las traen, porque confían en nosotros. Muchos no han podido venir porque están en campaña, con lo que ha quedado", reconocía.

En el camino hacia la ermita de San Juan, y antes de cruzar el propio río Manubles, se encuentra el puesto de Jabones Camacho Sacristán. "Somos una empresa de Ariza, con mucha tradición y que ahora se centra en los productos artesanos. La gente nos busca porque es buen producto, artesano y está hecho con aceite de oliva, que da muy buen resultado y le gusta a la gente", explicaba Miguel Ángel Clerencia. Entre las novedades que presentan está un 'champú solido': "Se hace especialmente porque reduce la necesidad de plástico", argumentaba.

"Venimos a promocionar, pero también a apoyar la comarca, que se vea que se hacen cosas diferentes, que hay iniciativa y no solo despoblación" (Alberto Estella, Saltamontes Bio)

Ya en la otra margen, todavía se encontraban más puestos, de Sediles e incluso con raíces en Huesca, en Berbegal. "Hacemos todo el proceso para elaborar aceites esenciales e hidrolatos, puros y naturales de aromática. Somos agricultores, también recolectores silvestres, tenemos destilería artesana y envasamos", relata Silvia Jiménez, responsable junto con Kurt Michael Arruda de la enseña Sabia Íbera. "Tenemos tres hectáreas de cultivo y unas 220 de recolección silvestre forestal", indica.

Junto a ellos, Alberto Estella, de la marca Saltamontes Bio, que agrupa a productores en ecológico de la comarca de Calatayud, explicaba que "venimos a promocionar, pero también a apoyar a la comarca, que se vea que se hacen cosas diferentes, que hay iniciativa y no solo despoblación". Lo hacen acompañando su puesto de un álbum de fotos, con imágenes de algunos de sus hijos: "Queremos que se vea lo que nos respalda: nuestras familias".

"Queremos concienciar de que se necesita de la iniciativa local para atraer proyectos, porque si no los recursos no vienen solos" (Marta Estopinán, Akis Local Manubles)

Para el alcalde anfitrión, Fernando Escribano, asumía que "los ríos unen. Nos identificamos con nuestros vecinos de Moros, Ateca, Villalengua, Torrijo… Es un acontecimiento importante, y más en este momento, en el que hay que dar un apoyo moral a quienes han perdido tanto. Queremos que se lleven los cajones vacíos de fruta y llenos de ilusión".

Marta Estopiñán, técnica de dinamización del proyecto local Akis Local Manubles, sostén de la Feria, defiende que esta entidad busca "visibilizar lo local, su patrimonio, su cultura y su gente". "Buscamos facilitar la formación, la diversificación y facilitar procesos de transformación. Queremos concienciar de que se necesita de la iniciativa local para atraer proyectos, porque si no los recursos no vienen solos", puntualizaba.

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