Los directivos de las empresas de Aragón, preocupados por duración de la pandemia y los costes de la energía

Son algunas de las conclusiones que el presidente y el secretario general de la Asociación de Directivos y Ejecutivos de Aragón (ADEA), Salvador Arenere y José Guillén, han destacado del indicador de opinión sobre la coyuntura economía de Aragón del último semestre de 2021.

La industria del automóvil está entre las más afectadas por la falta de suministros.
La industria del automóvil está entre las más afectadas por la falta de suministros.
Guillermo Mestre

La duración de la pandemia de covid-19, sin que se vea "el final", los costes de la energía, del transporte y materias primas o la elevada inflación son las principales preocupaciones de los directivos de las empresas de Aragón, entre quienes aumenta la percepción de un empeoramiento de la economía de la región para el primer semestre del año.

Estas son algunas de las conclusiones que el presidente y el secretario general de la Asociación de Directivos y Ejecutivos de Aragón (ADEA), Salvador Arenere y José Guillén, han destacado del indicador de opinión sobre la coyuntura economía de Aragón del último semestre de 2021 y las perspectivas hasta mitad de año sobre una muestra de 204 directivos aragoneses, el 48,3 % del sector servicios y el 51,7 %, directores generales.

Según ha detallado Guillén, el 54,1 por ciento de los directivos prevén estabilidad en Aragón para el primer semestre de 2022, el 14,8 % que la situación económica mejorará y el 31,1 % que empeorará, en este último caso, más de cinco puntos por encima del sondeo del segundo semestre de 2021 pero cinco puntos menos que lo que pensaban para el año pasado.

La estabilidad es la constante de todos los indicadores de la encuesta en las previsiones hasta junio: para el 62,5 % de los directivos en cuanto a la financiación, para el 58,9 % en lo que respecta a plantillas, el 58,8 % en ventas del mercado interior, el 67,5 % en exportaciones y el 76,9 % en importaciones.

No obstante, en todos ellos crece la percepción negativa, de forma que del 28,6 % de los directivos que pensaban que empeoraría la obtención de financiación el último semestre de 2021 se pasa al 32,8 %; en plantillas del 27,3 al 35,1 %, en ventas en el mercado interior, del 25,7% al 34,1 %, en exportaciones, del 8,5 % al 27,5 % y en importaciones, del 11,1 al 16,7 %.

Además de las preguntas recurrentes en los barómetros de opinión, en esta ocasión se ha preguntado a los directivos por cómo puede afectar la evolución de la pandemia en la actividad de sus empresas a corto, medio y largo plazo, por encima del 50 por ciento mucho o bastante en los tres supuestos, aunque a largo plazo, para el 43,1 no afectará en nada.

También han planteado a los directivos cómo influirá la reforma laboral en el empleo, y para quienes creen que lo hará de forma negativa, lo hará algo o bastante en el 62,1 %. Los fondos europeos es otra de las cuestiones incluidas en el sondeo en esta ocasión, y para 41,4 % su empresa no podrá beneficiarse de ellos, para el 22,4 % en algo y para el 36,2 %, es una incógnita.

Finalmente, cuestionados por si conviene a sus compañías que se potencien las relaciones comerciales con Cataluña, el 43,1 % no lo ve importante, el 36,2 % muy conveniente y 20,7 %, poco conveniente.

Según Arenere, las principales preocupaciones de los directivos se centran en la duración de la pandemia y la importante repercusión en sus empresas; el alto coste de la energía, con aumentos para algunas empresas de un 50 %, una "brutalidad" que incide en la competitividad, ha enfatizado, y también el alto coste del transporte y las materias primas, que hacen que se resientan las exportaciones.

La elevada inflación, que no será coyuntural, la alta deuda de España y su tendencia a seguir creciendo y la incertidumbre respecto del mantenimiento de estímulos por el Banco Central Europeo son otras de las cuestiones que más preocupan a los directivos, ha dicho Arenere, una situación en la que no ven aconsejable una reforma laboral que pueda repercutir en la tasa de paro.

En Aragón, ha agregado, preocupa la situación del automóvil y la falta de microchips, y aunque la adjudicación de nuevos modelos a Figueruelas son positivas, existen "nebulosas" ante las declaraciones del consejero delegado de Stellantis, Carlos Tavares, quien ha advertido de que España tiene que decidir si después de haberse convertido en el segundo fabricante de coches en Europa tras Alemania "quiere perder lo que ha conseguido en los últimos 20 a 30 años" o si "lo quiere hacer fructificar".

Además, ha apuntado Arenere, las declaraciones sobre las macrogranjas del ministro de Consumo, Alberto Garzón, ponen en peligro la llegada de inversiones y el mantenimiento del sector agroindustrial y existe preocupación por la falta de transparencia y excesiva burocracia en la tramitación de fondos europeos. EFE

anh/mrl

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