Está en marcha desde 2013, pero es evidente que sigue funcionando con los mejores parámetros de las ‘start up’, con mucho empuje, innovación y abierta a los escenarios de cambio que vivimos continuamente. Hunteet, empresa creada por los ingenieros aragoneses Alberto Oliván y Juan Turmo que aplica la gamificación para la comunicación a través de fotos con las que se ganan premios, se ha convertido en una de las primeras empresas aragonesas que ya cobra en criptomonedas.

Además de seguir trabajando en la transformación de la publicidad en un juego, Hunteet está ofreciendo asesoría y acompañamiento digital a firmas como Jobchain, una compañía con sede en Viena centrada en el desarrollo de una plataforma para la búsqueda de empleo y administración pública, con el fin de contribuir a la adopción mundial de la tecnología blockchain. Creada por el emprendedor valenciano José Bay, esta empresa austriaca ha lanzado una criptomoneda llamada Job, que según reseña Alberto Oliván estuvo entre las que más ha crecido entre 2020 y 2021, con un despegue en el último mes de un más que llamativo 100%. La capitalización de esta criptodivisa, precisa, es ya de 22 millones de dólares (unos 18,48 millones de euros), según refleja la plataforma Coinmarket.

Hunteet recibe a cambio de su trabajo para Jobchain una parte de la cantidad correspondiente en jobs, la divisa digital. Este modo de remuneración, explican desde la empresa aragonesa, se encuadra dentro de las reglas de la retribución en especie, no pudiendo ser ésta superior al 30% de la percepción salarial total.

«El job es una criptomoneda que está en constante crecimiento», destaca Oliván, quien confía en este mercado puesto que «su tecnología rápida y segura que está funcionando ya a nivel internacional, es un campo que está progresando». La compañía zaragozana confía en que en 2021 esta divisa mantenga el crecimiento de 2020 y por ello quiere ser «parte de esa evolución».

José Bay, según apuntan desde Hunteet, defiende la máxima de que los salarios deben ser pagados en criptomonedas y señalan que Jobchain es una aplicación, tanto web como para dispositivos móviles, que incluye una cartera para almacenar, enviar, recibir y pagar con criptodivisas; un mercado de bienes y servicios verificado, y operar (ya sea pagar o recibir salarios) con este tipo de moneda. Actualmente, cuenta con oficinas en Madrid, Viena, Zaragoza y Palo Alto (California, Estados Unidos) y tiene más de 20 empleados, algunos de los cuales teletrabajan desde la capital aragonesa. De hecho, la idea es erigir la sede de España en Zaragoza.

Alberto Oliván, máximo responsable de Hunteet, está convencido de que el ‘mundillo’ de las criptomonedas «ha llegado para quedarse» y que por ello él y su equipo participan activamente en su impulso.

Con seis trabajadores en plantilla y una facturación de algo más de 100.000 euros el año pasado, lo que supone un ligero crecimiento respecto al ejercicio anterior a pesar de la crisis causada por la pandemia, Hunteet confía en un buen 2021.

«Nuestro objetivo es crear vínculos y experiencias entre nuestros clientes y el público joven, donde aumentar su visibilidad e imagen de marca», sostienen desde esta firma zaragozana en referencia a lo que pueden hacer para las empresas que les contratan. En Aragón han contado con el equipo de Oliván y Turmo instituciones como el Ayuntamiento de Zaragoza, entidades públicas como Turismo de Aragón y compañías como Aramón, Puerto Venecia o HMY, la multinacional que integra a la marca Yudigar.

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