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Abre en Zaragoza una filial del grupo turco Arkel, de tecnología para ascensores

Mario Ruiz, ingeniero con experiencia en el sector, pone en marcha la empresa con una sede en el polígono Malpica.

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Fachada de las instalaciones de Arkel en el polígono Malpica de Zaragoza.
Arkel

Mario Ruiz, ingeniero técnico industrial por la Universidad de Zaragoza, trabajó más de ocho años en la planta que el grupo Wittur, fabricante de componentes para ascensores (que antes lo fue del elevador completo), tiene en el polígono de Maplica. En su puesto tuvo mucho contacto con la compañía turca Arkel, especializada en equipamiento eléctrico y electrónico aplicado al sector de la elevación. Un tiempo después, ya en otro sector de actividad (renovables), Ruiz fue contactado por directivos de Arkel, con quienes coincidió en su interés en explorar la posibilidad de abrir aquí una filial de la firma turca que ahora se ha hecho realidad.

El plan de negocio para crecer en España elaborado por el ingeniero aragonés gustó a Arkel, que decidió apostar por una nueva aventura en Zaragoza que inició el propio Ruiz en noviembre de 2019, realizando trámites para instalar la nueva sede y que dio lugar a un importante hito en julio de 2020 con el registro oficial de Arkel España Tecnología de Ascensores S. L. Esta iniciaba así su andadura, también en el polígono Malpica, en un sector pujante en Zaragoza que en fechas recientes dio muy malas noticias con el cierre de la actividad productiva de la multinacional suiza Schindler en el polígono Empresarium, en la Cartuja Baja.

Arkel es una empresa dedicada al desarrollo, producción, venta y soporte técnico de placas de control y armarios de maniobras, sistemas de telemonitorización y comunicaciones de alarmas, rescates de emergencia, sistemas regenerativos y displays. «Su especialidad son los cuadros de maniobras de los ascensores y también suministran cableados, botoneras de piso y cabina y componentes de emergencia», explica Mario Ruiz.

En el tiempo que el ingeniero zaragozano ha impulsado el proyecto se ha conseguido ya generar un negocio «en crecimiento», primero facturando directamente desde Turquía y después, con la filial española constituida, desde aquí. Las instalaciones de Arkel España, ubicadas en el parque empresarial Inbisa del polígono Malpica II, cuentan con dos plantas, la de arriba de oficinas y la de abajo para almacén. Desde ahí la empresa puede suministrar piezas a los clientes y dar servicio postventa. «El producto es muy competitivo en precio y con muy buena calidad, muy robusto», asegura Ruiz.

Según el plan de negocio elaborado por el profesional aragonés, tras un inicio en la actividad que ha generado buenas expectativas, el siguiente paso es configurar una estructura de cuatro o cinco personas para afianzar la actividad de distribución del producto que viene de Turquía y de postventa con la idea a la larga de poder fabricar cuadros eléctricos aquí. «Los catorce meses que llevo ya trabajando en esto, con buenos resultados, me permiten albergar buenas expectativas», apunta Mario Ruiz. Arkel España prevé superar este año, indica, el millón de euros de facturación.

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