"La mayor parte de los trabajadores fijos del departamento de atención al cliente de Iberalbión han secundado la huelga. Los temporales no tanto", señala Javier Giménez, delegado de OSTA y presidente del comité de empresa de Iberalbion, ubicada en Plaza y perteneciente al grupo Wizink (creado a partir del antiguo negocio on line de Banco Popular y el fondo Värde Partners propietarios del 51%).

"Estamos entre 450 y 500 trabajadores, pero han sido sobre todo los de atención al cliente, alrededor de 100, los que han parado. Sobran los motivos. Trabajamos más, con peores salarios y nos han quitado los incentivos". El cambio de propiedad, ha explicado, al ser ahora de este grupo de inversión norteamericano, solo ha servido para empeorar las condiciones laborales."Los horarios son peores, los incentivos se han reducido y cada vez es mayor la distancia que separa a  los trabajadores veteranos y los de nueva incorporación", asegura Giménez. "La temporalidad es entre el 50 y el 60%. Les van haciendo contratos de 4 meses. Normalmente les van renovando", pero muchos de ellos, ha indicado, no han secundado la huelga.

El presidente del comité de empresa (donde OSTA y UGT cuentan con la mayor representación) ha manifestado que con esta huelga se pretende forzar a la dirección a buscar soluciones al malestar de la plantilla por la precarización en las condiciones de trabajo: "horarios que impiden la conciliación de la vida familiar y personal, la desmesurada presión a la plantilla y la excesiva carga de trabajo". Espera que con el paro de hoy, la dirección tome cartas en el asunto. Y recuerda que el pasado día 13 en el SAMA fue imposible acercar posturas para evitar la huelga. Por eso, no descartan más movilizaciones si la situación no mejora, advierten desde el comité.