Las ventas de Imaginarium cayeron un 41% en 2017

La cifra neta de negocio consolidada del Grupo Imaginarium se sitúa en 49,7 millones de euros al cierre del ejercicio 2017 (un 41% inferior a la de 2016). Según los datos publicados por el Mercado Alternativo Bursátil (MAB), esta nueva caída en ventas "es consecuencia, en su mayor parte, del plan de cierre de determinadas unidades de negocio o tiendas con baja rentabilidad. Adicionalmente, algunos mercados han mantenido comportamientos negativos, alejados de las estimaciones realizadas al inicio del ejercicio, entre otras cosas por el retraso en la consecución de la refinanciación".

Dicha publicación del MAB recoge que "el margen bruto ha sido de 26, 4 millones que representa el 53,1% de la cifra neta de negocios (CNN), bajando 2,8 puntos respecto al mismo periodo del año anterior, donde el retraso en la firma de la refinanciación ha sido determinante". Pese a la reducción de costes totales operativos de 15,1 millones de euros (un 33% menos que al cierre de 2016), la empresa que creó Félix Tena hace 26 años sigue en pérdidas "el resultado operativo (EBITDA) del Grupo se sitúa en -4, 6 millones de euros".

De acuerdo a lo publicado en el MAB, el resultado neto del 2017 (11,8 millones de euros) se ve afectado por un impacto positivo generado por la reducción de la deuda financiera que resulta de la reestructuración. Así, "la deuda financiera neta a cierre del ejercicio 2017, tras la ejecución de la reestructuración de la deuda financiera, es de 11,7 millones de euros, lo que supone una disminución relevante (20 millones) respecto de la deuda financiera neta de 2016.

En la información financiera sobre la empresa que revela el MAB, "las ventas retail (ventas PVP netas) del conjunto de tiendas y canales de venta Imaginarium, a tipo de cambio constante, han decrecido en el 2017 un 32,6% (dato ligeramente menor que la reducción de facturación)".

Asimismo, se dice que "desde el inicio del ejercicio, la sociedad ha llevado a cabo un intenso y largo proceso para refinanciar su deuda financiera y obtener fondos adicionales por parte de nuevos inversores, de forma que ambas medidas permitieran reestablecer el equilibrio patrimonial (especialmente afectado por el cierre de determinadas filiales) e iniciar una nueva etapa del grupo".

Fue el 20 de noviembre de 2017 cuando se firmó el Acuerdo Marco de Reestructuración financiera y los inversores que forman parte de dicha reestructuración entraron a formar parte del capital de la sociedad. Dicho acuerdo de reestructuración financiera ha sido homologado judicialmente mediante Auto de 1 febrero de 2018 dictado por el Juzgado número 1 de Zaragoza, homologación que es firme desde el 5 de abril de 2018. A raíz de ese acuerdo, se explica en el MAB, "los inversores han procedido a suscribir un contrato de préstamo convertible en acciones de la sociedad, por importe de 4 millones (importe que será aportado a las entidades financieras como pago parcial de su deuda y posteriormente capitalizado por parte de los inversores, lo que previsiblemente sucederá en el mes de julio, previa convocatoria al efecto de la Junta General de accionistas.

Junto a lo anterior, el plan de negocio del grupo mantiene las siguientes medidas como principales ejes de gestión para la estabilización del negocio y recuperación de la rentabilidad: el cierre organizado de determinadas áreas de negocio con menor rentabilidad, para disminuir el tamaño del Grupo y aumentar su rentabilidad y competitividad. En segundo lugar,  acomodar las estrategias de negocio a los nuevos patrones de consumo y en aquellas referencias con mejor rentabilidad y retorno. Y en tercer y cuarto lugar, el mantenimiento del plan de reducción de costes operativos y reducción de estructuras internacionales en filiales, así como de la capacidad del grupo para obtener líneas de circulante adicional por importe de hasta 5 millones de euros, según el contrato de reestructuración, que pueden ser aportados por parte de los nuevos inversores o terceros, si así se considera oportuno.