Un equipo capaz y comprometido, una firme apuesta por la tecnología y una orientación claramente internacional son los tres pilares sobre los que se sustenta la andadura de Fersa Bearings, según afirma su director general, Pedro Pablo Andreu.

Este año, la empresa, dedicada al desarrollo, fabricación y distribución de soluciones de rodamientos para el sector de la automoción cumple su 50 aniversario con un balance más que satisfactorio. A su presencia en los cinco continentes, hay que sumar los buenos resultados con los que cerró el pasado año 2017 y los numerosos retos y proyectos que desde la empresa aseguran tener por delante. Por si esto fuera poco, la organización de los premios ‘Aragón, empresa y futuro’ reconoció este lunes su expansión internacional con uno de los galardones de la noche.

Para Andreu, ya solo participar en estos premios era "un privilegio" y una forma de dar visibilidad a su modelo de negocio: "Nos gustaría que nuestro ejemplo sirva para que otras empresas vean que es posible apostar de verdad por el talento, la tecnología y la internacionalización".

En la dilatada carrera internacional de Fersa Bearings se pueden señalar varios hitos. Entre ellos, las primeras ventas que se realizaron fuera de España hace más de 30 años, el hecho de ser proveedor del mayor fabricante de ejes de Estados Unidos, las aperturas de una fábrica en China en 2011 y de filiales en Brasil y Estados Unidos en 2015 y, por último, la adquisición de la compañía Austriaca NKE en 2016.

Con cuatro fábricas y seis centros logísticos en Europa, Asia y América y una plantilla de más de 500 personas, en Fersa Bearings tienen claro que deben seguir marcándose nuevos desafíos que consoliden su expansión internacional. Así, abrir nuevas filiales, sondear posibles adquisiciones y proveer a estratégicos fabricantes a nivel mundial son solo algunos de los objetivos previstos a corto y medio plazo.