Aragón podría crear 21.000 puestos de trabajo a finales de 2019, según BBVA Research

Las previsiones del centro de estudios de la entidad bancaria considera que la economía aragonesa mantendrá un crecimiento del 2,4% este año y el que viene

De izda. a dcha.: Miguel Cardoso, economista jefe de España de BBVA Research y Luis Llorens, director Regional Norte BBVA.
De izda. a dcha.: Miguel Cardoso, economista jefe de España de BBVA Research y Luis Llorens, director Regional Norte BBVA.
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BBVA Research prevé que el PIB de Aragón crezca al menos un 2,4% tanto en 2018 como en 2019, lo que supone una ligera desaceleración respecto a 2017, motivada por un agotamiento progresivo en el crecimiento de la demanda interna. Así lo indica el servicio de estudios de BBVA en su último informe ‘Situación Aragón’ presentado este miércoles por Miguel Cardoso, economista jefe para España de BBVA Research y Luis Llorens, director regional de Territorial Norte de BBVA en la Cámara de Comercio. De cumplirse estas previsiones, se podrían crear más de 21.000 puestos de trabajo y la tasa de paro se reduciría hasta el 7,7% a finales de 2019.

Según Cardoso, Aragón mantendrá en los próximos dos años el crecimiento en las exportaciones y también en la inversión, gracias a un entorno económico europeo favorable y al impacto "muy limitado" de la incertidumbre creada por las situación política en Cataluña. Así BBVA Research estima que la economía aragonesa crezca un 2,4% en 2018, ocho décimas menos que el año pasado, algo que se debe al menor impulso de algunos “vientos de cola” que venían apoyando a la demanda interna. Así, se puede mencionar el agotamiento en el recorrido a la baja de los tipos de interés, el reciente aumento de los precios del petróleo o la disminución de la “demanda embalsada” (aquella que se acumuló durante el período de crisis). Peso a todo, dijo el responsable del servicio de estudios, "la inercia positiva se mantiene y el sesgo al alza" de la economía aragonesa.

"Las perspectivas se mantienen favorables de cara al primer semestre de 2018 lo que supone "5 años consecutivos de crecimiento desde 2013". En 2017, la economía aragonesa aceleró su ritmo de crecimiento hasta el 3,2% frente al 2,7% en 2016.

Sin embargo, pese a las buenas perspectivas, Cardoso incidió en que siguen siendo necesarias nuevas medidas que incrementen la productividad media del factor trabajo. Adicionalmente, aunque se recupera el nivel de PIB per cápita de antes de la crisis, el empleo se encuentra siete puntos por debajo del máximo alcanzado en la anterior época expansiva. También la tasa de temporalidad ha vuelto a aumentar.

Por ello, subrayó, "se debe seguir incidiendo en políticas que reduzcan la tasa de paro y la precariedad en el mercado de trabajo".

Por último, Cardoso ha advertido de que en 2018 persistirán algunos de los riesgos a los que se ha visto expuesto Aragón en 2017: la incertidumbre derivada del entorno político en Cataluña podría restar entre tres y cuatro décimas al PIB aragonés en 2018. A la incertidumbre por la política catalana se suman los posibles efectos del resultado final del 'brexit'. A nivel doméstico, persisten incertidumbres sobre las cuentas públicas, si finalmente se confirmase el incumplimiento de déficit en 2017.

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