La factoría zaragozana de Opel cerró 2017 con una producción total de 382.425 vehículos, un 6% más que el año anterior, según informaron ayer desde PSA propietaria de la marca desde el pasado año. Este incremento estaría motivado por el lanzamiento de los dos nuevos modelos el Opel Crossland X y el Citroen C3 Aircross.

Desde el grupo francés destacaron que la factoría "es por primera vez en su historia una planta multimarca". Del total de vehículos producidos  fueron 196.424 Opel Corsa; 17.910, Opel Meriva (modelo que fabricó hasta marzo); 68.172 Opel Mokka X; 62.885 Opel Crossland X y 37.034 Citröen C3 Aircross.

El fabricante resalta que "por quinto año consecutivo, la planta aragonesa ha conseguido incrementar sus volúmenes de producción gracias a las asignaciones y el lanzamiento de nuevos modelos". Este incremento lo considera una "importante recuperación y mejora" para alcanzar su plena capacidad productiva situada en 480.000 unidades al año. Actualmente la planta de Zaragoza está utilizando el 80% de su capacidad instalada, explican.

En ella se fabrican los siguientes modelos: Opel Corsa 5 puertas, 3 puertas y Van, Opel Crossland X, Opel Mokka X, sus versiones de GLP o Autogas y el Citröen C3 Aircross.

En 2017, el 89% de los vehículos producidos en Zaragoza se exportaron a otros países principalmente europeos y el 11% restante se destinó al mercado español. Entre sus principales países de exportación destacaron: Alemania, Italia, Reino Unido, Francia y Bélgica.

El comité de empresa y la dirección negocian actualmente el nuevo convenio colectivo, en 'stand by'. La compañía pide un ajuste de costes laborales y mejora en los tiempos de trabajo para equipararla con la planta de PSA en Vigo. El pasado 15 de diciembre se cumplió el primer plazo dado por la dirección para llegar a un acuerdo y esta sigue pidiendo celeridad.