La negociación en Opel se tensa al suspender la empresa el contrato de relevo desde enero

El comité pide a la compañía que lo retire ya que unos 400 trabajadores esperan firmarlo en 2018. No se ha avanzado en la contención salarial ni en la flexibilidad planteada el viernes por los sindicatos.

La principal industria de Aragón llega este año a la Navidad en una situación harto complicada con una negociación de convenio abierta en canal y unas posturas muy discrepantes. La tensión llegó ayer a su punto álgido al presentarse los sindicatos en la mesa con la intención de seguir avanzando en la propuesta de contención salarial y flexibilidad que comunicaron el pasado viernes y toparse con el anuncio de la dirección de que suspende la aplicación del contrato de relevo a partir del 1 de enero de 2018 y que no renueva a los 170 eventuales cuyo contrato vence este 31 de diciembre.

"Tenemos que afrontar un excedente de plantilla, al menos temporal, consecuencia de la reducción de velocidad de la línea del Corsa a partir de la vuelta de vacaciones en enero". En lugar de hacer 59 coches/hora, se pasarán a hacer solo 50. Así lo comunicó ayer la dirección a la representación de los trabajadores justificando de este modo –liberar unos 100 trabajadores de la línea 2 para pasarla a la 1 y recuperar a personas del paro– la decisión de dejar de aplicar el contrato de relevo en 2018. Una medida que cayó como un jarro de agua en el comité ya que supondrá que los 400 trabajadores que cumplirán 61 años el próximo año se verán obligados a tener que seguir trabajando en la factoría y que aquellos jóvenes aspirantes a relevarles se quedarán sin contrato.

Acaba así, con muy mal sabor de boca un diálogo sobre el convenio colectivo que apenas ha mostrado avances y que seguramente quede en ‘stand by’ hasta el 2 de enero ya que la fábrica estará sin actividad la próxima semana. El comité pidió a la empresa que para reunirse mañana sería conveniente que retirase la inaplicación del contrato de relevo en 2018, pero la empresa dijo que no. Así que sigue en el aire si habrá reunión mañana.

Independientemente del paréntesis navideño, la tensión entre la compañía y los sindicatos sigue dominando una negociación que de nuevo se ha enquistado cuando parecía haber empezado a destensarse la semana pasada al ceder ambas partes: los sindicatos mostrando su disposición a hablar de contención salarial y la empresa al retirar la rebaja del 6%. A día de hoy, el pulso sigue al rojo vivo. Opel continúa reprochándole al comité que al «no haber una fórmula de trabajo en sábados acordada con ellos, cubrirán los requerimientos de la línea 1 (Crossland X, Mokka X y C3 Aircross) en estos primeros meses de 2018 con "turnos adicionales de producción en viernes noche y sábados mañana previstos en convenio colectivo".

Además, vuelve a cargarles la responsabilidad de no haber sido capaces de alcanzar un acuerdo de competitividad el pasado 15 de diciembre, lo que les sitúa, recuerda, en otro escenario. "El convenio colectivo entra en una fase relacionada con la continuidad de las operaciones a la espera de las decisiones estratégicas y de producto que se puedan tomar por parte del grupo PSA".

"Nos oponemos frontalmente a la suspensión del contrato de relevo. Es prioritario para UGT que se siga aplicando como estaba pactado", señaló José Carlos Jimeno, secretario de la sección sindical de UGT en Figueruelas, que mostró su disposición a seguir negociando y a no levantarse de la mesa aún con propuestas como la de ayer encima de ella.

"Ha sido una reunión muy tensa. La parte social se ha mantenido unánime en avanzar en contención salarial y flexibilidad y la dirección nos ha dicho que están en una fase nueva, que ya no tienen prisa y que van a suspender el contrato de relevo a partir del 1 de enero, que no renuevan a las eventuales ni acometen más contrataciones que iban a hacer al no ponerse en marcha en febrero por razones técnicas los 18 turnos", señaló José María Fernando, secretario general de la sección sindical de CC. OO. en Figueruelas. A su juicio, el anuncio de Opel de suspender el contrato relevo cuando hay 400 personas esperándolo es una forma de presionar a los sindicatos.

"Es una moneda de cambio para meternos presión", aseguró también Santiago Arcos, de CGT. "Incluso nosotros habríamos accedido a hablar de hacer toda la producción o aceptar temporalmente la flexibilidad. Había disposición de todos los sindicatos. Y van y salen con esto", añadió.

Desde OSTA, mostraron su sorpresa por este nuevo anuncio de la dirección y recordaron su disposición a valorar una contención salarial en aras a intentar desbloquear la situación, si bien siguen considerando "innegociables" los otros puntos recogidos en la plataforma que Opel presentó el 28 de noviembre.

Asimismo, Acumagme lamentó el anuncio de la dirección de suspender uno de los mayores beneficios sociales de la planta. "Esperemos que lo retiren tarde o temprano porque si no, las 400 personas que estaban ya pensando en firmar su contrato de relevo serán los primeros perjudicados de esta negociación".

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