Citroën exhibe en Fráncfort su más firme baza entre los SUV compactos, el 'zaragozano' C3

Carlos Tavares, presidente del grupo francés, explicará este martes en el Salón del Automóvil germano los planes de PSA para la recién adquirida Opel.

Todo preparado en el Salón del Automóvil de Fráncfort para la presentación del Aircross.
Citroën exhibe en Fráncfort su más firme baza entre los SUV compactos, el 'zaragozano' C3
KAI PFAFFENBACH/reuters

El vehículo ya fue presentado como un coche de concepto (es decir, no definitivo) en el último Salón del Automóvil de Ginebra, en marzo pasado. Y su imagen final, ya con el nombre que saldrá al mercado, fue conocida después por periodistas de toda Europa el pasado 12 de junio en París. Pero un vehículo con ambiciones de triunfar entre los consumidores del Viejo Continente debe ser objeto de una presentación al gran público en uno de los dos certámenes del sector que se celebran cada año en esta zona del mundo. Por eso Citroën exhibe desde este martes en el Salón de Fráncfort su coche ‘zaragozano’, el C3 Aircross que fabrica ya en serie en la planta de Opel en Figueruelas, como su gran "primicia mundial", su más firme baza para competir en el segmento de los SUV o ‘todocaminos’ compactos.

"Es nuestra gran apuesta en Fráncfort", apuntan fuentes de Citroën al hablar del vehículo que representará más fielmente a la segunda marca del grupo francés PSA, que incluye a Peugeot, DS y, desde hace poco más de un mes, a Opel. Con su "fuerte personalidad" y "el espacio a bordo y la modularidad de un monovolumen, además de confort y conectividad", el C3 Aircross está en condiciones de ocupar un importante hueco en el mercado del competitivo segmento de los ‘todocaminos’ pequeños. Un mercado en el que habrá de enfrentarse a su ‘hermano’ de Opel, el Crossland X, con el que comparte plataforma y línea de montaje en la factoría de Figueruelas.

La primera pareja de vehículos ensamblados de modo conjunto por PSA y Opel, fruto de la alianza firmada por el grupo francés y General Motors en 2012, pugnarán dentro de unos meses por ganarse la confianza de los consumidores europeos en un segmento en el que estará también otro vehículo que se presentará en Fráncfort, el Seat Arona, una suerte de ‘hermano pequeño’ del exitoso Seat Ateca. Un escenario en el que compiten también el Hyundai Kona y el Kia Stonic.

En Fráncfort, el grupo PSA apuesta fuerte por el vehículo ‘aragonés’ de Citroën, que también presentará el Space Tourer Rip Curl, un coche de concepto, y el nuevo E-Mehari Styled by Courrèges, una edición limitada que "prosigue el encuentro creativo de dos marcas francesas icónicas, a las que se han incorporado algunas evoluciones para obtener un vehículo más polivalente".

De las otras tres marcas de la multinacional automovilística francesa solo habrá novedades en la última filial recientemente incorporada, Opel. La marca del rayo ha venido a la capital financiera alemana con tres "primicias mundiales": El Grandland X, un SUV de mayor tamaño que el Mokka X, y dos versiones nuevas del Insignia (el deportivo Insignia GSi, y el más ‘aventurero’ Insignia Country Tourer).

Fráncfort será, en cualquier caso, el primer gran salón del automóvil en el que Opel forma parte ya de PSA, una vez aprobada la venta de la marca alemana por parte de GM. Es por ello que Carlos Tavares, presidente del grupo francés, recibirá este martes a los periodistas en el ‘stand’ de Opel, donde dará cuenta de los planes que tiene la compañía para su nueva filial.

Carlos Tavares está convencido de que con su gestión puede conseguir que la empresa que fundaron los hermanos Opel en Rüsselsheim, Alemania, puede volver a la rentabilidad económica después de 17 años de pérdidas. Sabe que no será tarea fácil y por ello cuenta con conseguir ese objetivo -el ansiado ‘brek even’, el equilibrio de cuentas- en el año 2020.

Nueva andadura

El salón del automóvil germano, así las cosas, certificará el inicio de la nueva andadura de Opel en PSA, aunque aún no se sabe nada del plan de viabilidad que se ha encargado a los directivos de la empresa alemana para su revisión por la dirección del grupo francés (está previsto que el contenido del plan se conozca a final de mes).

La cita de Fráncfort, al margen de ese contenido más relacionado con la industria, llega con gran expectación por conocer las últimas novedades que se cuecen entre todas las marca. Seguirá notándose, apunta ya el programa, la firme apuesta de numerosas compañías por el coche eléctrico, si bien todo parece indicar que habrá más novedades en el terreno de los vehículos autónomos como una opción de movilidad con un peso creciente.

De lo que sí se esperan detalles es de la evolución de los SUV (Sport Utility Vehicles), está vez entre un amplio abanico de tamaños. Solo la nueva PSA, por ejemplo, contará en breve en el mercado con el Opel Grandland X, el Opel Mokka X, el Opel Crossland X y, a partir de ahora, con el Citroën C3 Aircross, de cuyo éxito están convencidos en la compañía.

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