Los nuevos modelos –Crossland X y Citroën C3 Aircross– que pasan por la línea 1, junto con el Mokka X, están generando tal carga de trabajo en la planta de Opel Figueruelas que la dirección de la compañía pidió ayer que se trabajen los cinco días de vacaciones colectivas que le quedaban a la plantilla sin fijar y que normalmente se disfrutaban en Navidad. Este año seguramente no será posible, al menos para los trabajadores de la línea 1, ya que ni siquiera con esta propuesta de aprovechar las vacaciones restantes, que deberá ser refrendada por el comité de empresa este viernes, será suficiente. Y habrá que trabajar bastantes turnos de fin de semana para sacar la producción prevista para este año. Así se informó ayer a la comisión negociadora del comité.

La dirección también planteó a la representación de los empleados que los días a trabajar serían el 11 y 13 de octubre, dos más a elegir –o bien el 30 y 31 de octubre o 2 y 3 de noviembre– y el 7 de diciembre. Asimismo, la compañía les comunicó que en la línea 2, la del Corsa, hay menos carga de trabajado y, por tanto, los trabajadores de dicha línea sí podrán disfrutar de esos 5 días de vacaciones colectivas, y además se verán afectados por varios días de paro técnico no solo en lo que queda de año, sino previsiblemente también el año que viene, por la menor demanda de este modelo para el que ya está anunciada una nueva generación, la sexta, que llegará a finales de 2019.

Ya a principios de año, el director general de la planta, Antonio Cobo, anunció que 2017 iba a ser un año de duro trabajo al tener que hacer dos lanzamientos muy seguidos, el de Crossland X, del que ya hay 50.000 pedidos y del C3 Aircross, que está en plena curva de arranque. De ahí que este calendario laboral haya estado marcado fundamentalmente por las necesidades de la empresa. Cabe recordar que se adelantó una semana de vacaciones a marzo para dejar la planta de Figueruelas preparada para el lanzamiento del Crossland X y que ahora en agosto se han disfrutado 12 días, completados con tres festivos, para poder estar en marcha ya el 20 de este mes con toda la operativa de lanzamiento del C3 Aircross, primer modelo que produce la planta que no es Opel.

Algunos sindicatos con representación en el comité de Opel como OSTA, CGT y Acumagme ya expresaron a principios de año que habrían preferido dejar negociado el calendario laboral con el fin de haber podido cerrar vacaciones para el mes de agosto y la Navidad, pero finalmente no ha sido así, y "las vacaciones las ha planificado la empresa", dijeron, en un año marcado por circunstancias excepcionales, referidas no solo a los dos lanzamientos sino especialmente a la compra de Opel por parte de PSA, firmada el 6 de marzo en París, ultimada el pasado 1 de agosto y cuyo próximo capítulo será el plan de viabilidad que se presente pasados cien días desde el inicio del mes estival que acaba mañana.