Las empresas biotecnológicas contribuyeron de manera directa, indirecta e inducida a la generación de 90.000 millones de euros de renta en 2015, lo que supone en torno al 8,6% del PIB total, y generaron 930.000 puestos de trabajo, un 5,4% del total del empleo nacional. Además, las Administraciones Públicas recaudaron 26.000 millones de euros de la actividad del sector, un 2,5% del PIB.

Del 8,6% que aporta el sector al PIB, las entidades con dedicación principal a la biotecnología contribuyeron en un 0,8% y contribuyeron con 130.453 empleados al empleo nacional, aportando casi 3.000 millones de ingresos a las Administraciones Públicas.

Estas son las principales conclusiones del Informe Anual de la Asociación Española de Bioempresas (ASEBIO), que recoge los últimos datos del sector biotecnológico español y, por primera vez, el impacto de este sector en la economía española, con el objetivo de obtener unos ratios que no sólo detallan las magnitudes recogidas por el INE en su Encuesta sobre la Innovación de las Empresas, sino que también permiten compararlos con otras ramas de actividad.

La presentación del informe, que ha estado presidida por el ministro de Economía y Competitividad, Luis de Guindos, ha corrido a cargo del presidente de ASEBIO, Jordi Martí, y el director general de ASEBIO, Ion Arocena.

Según los responsables del documento, el impacto económico recogido no se limita exclusivamente a impacto de producción o facturación sobre PIB sino que recoge los gastos corrientes de las empresas y de inversión incrementando así la producción suya y de sus proveedores. También contabiliza las rentas salariales, las remuneraciones de los empleos indirectos, que a su vez provocan un aumento del consumo privado; y del mismo modo, se recoge una serie de impuestos que incrementan los ingresos de las administraciones públicas.

Encuesta sobre la innovación de las empresas

El INE, como cada año, desglosa en el Informe ASEBIO 2016 los datos recogidos en el Módulo de Biotecnología perteneciente a la Encuesta sobre Innovación de las Empresas 2016. En el mismo, se recoge que en 2015 existían 2.981 empresas que realizaban actividades relacionadas con la biotecnología, un 8,72% más, de las que 654 son estrictamente biotech, un 4,17% más.

El 58,8% de las compañías 'biotech' dedican su negocio a la salud humana, mientras que el 33% lo desarrollan en el ámbito de la alimentación. En cuanto a las compañías que utilizan la biotecnología como herramienta de producción, se concentran en el sector de la alimentación (83,3%) principalmente, y un 9,6% en la salud humana.

El número total de trabajadores directos del sector de la biotecnología alcanzó los 182.156 trabajadores, un 2,35% más, y la cifra de negocios de las empresas estrictamente biotech fue de 8.180 millones de euros, con un crecimiento del 7,38%.

En cuanto al gasto interno en I+D en biotecnología, fue de 578 millones de euros, lo que supone un incremento del 8,31%, volviendo a recuperar la senda de crecimiento de años pasados, según datos del INE referentes a 2015. Tal y como ha detallado el director general de ASEBIO, Ion Arocena , este dato marca un "nuevo máximo histórico" desde 2010.

En esta partida, las empresas con dedicación exclusiva a la biotecnología, aunque en términos totales suponen el 22% del número de unidades que realizan actividades biotecnológicas, representan casi el 50% de las unidades que realizan I+D y ejecutan más del 63% del gasto total en biotecnología.

Igualmente, destaca que, en el momento actual, realizan actividades relacionadas con la biotecnología dos de cada 1.000 empresas; que además, cuentan con unos niveles de productividad significativamente más altos que el conjunto de la economía y con ratios de crecimiento medios anuales en empleo (2,6%), superiores a los registrados en el conjunto de la economía española (2,1%).

Cataluña, Madrid y Andalucía

Por distribución geográfica, Cataluña se posiciona como la comunidad autónoma con una mayor concentración de empresas usuarias de biotecnología (17,3%), seguida de Andalucía (14,7%) y Madrid (10,1%). En cuanto a empresas con dedicación principal a la biotecnología, también la mayor parte se registra en Cataluña (27,6%), Madrid (16,1%) y Andalucía (12,3%). En 2016 se crearon 43 nuevas empresas biotecnológicas, siendo Andalucía la que mayor número ha creado, con diez, seguida de Cataluña, con nueve, País Vasco con cinco y la Comunidad de Madrid, con cuatro.

De Guindos ha destacado que el sector de la biotecnología ha dado un "salto excepcional" en los últimos 20 años y que es uno de los que más aporta a la economía española.

En líneas generales, De Guindos ha destacado que España se encuentra en un "contexto positivo en el que la economía internacional ya se está recuperando" y espera que el país crezca por encima del 3%, ya que, según ha asegurado, "se ha modificado el modelo de crecimiento de la economía española", por lo que habrá que asegurar este modelo para que "este crecimiento se consolide".

Según el ministro, la innovación y la investigación constituyen "palancas clave" a la hora de impulsar este crecimiento económico y, en este sentido, ha destacado el papel "fundamental" de las empresas del sector biotecnológico.

En cambio, tal y como ha precisado, la reducida escala de las pymes supone un "freno" para los procesos innovadores. "En España, las empresas, las pymes, fuente fundamental del tejido empresarial en nuestro país, son mucho más pequeñas en nuestro entorno, y eso dificulta la innovación, la mejora de financiación y limita la productividad", ha resumido.

Finalmente, De Guindos ha hecho hincapié en la contribución social del sector. "Su contribución social es indudable, son numerosas y cada vez más las soluciones ofrecidas en salud, envejecimiento, alimentación y energía", ha manifestado el ministro, que considera que apostar en innovación "mejora la calidad de vida de los ciudadanos".