Pikolin demolerá 66.000 m2 de naves a partir de mayo para construir Torre Village

Torre Village, el enorme ‘outlet’ que se ha proyectado en la carretera de Logroño, ya está un poco más cerca de ser una realidad. Este nuevo espacio comercial que promueve Iberebro, sociedad patrimonial de la familia Soláns, ocupará las antiguas instalaciones de Pikolin, y el objetivo es que abra sus puertas a finales de 2018. De momento, la empresa ya cuenta con la licencia de derribo, después de que ayer la gerencia de Urbanismo aprobara este trámite con los votos de PP, PSOE y Ciudadanos, y las abstenciones de ZEC y CHA.

Según apuntaron fuentes de Iberebro, está previsto que los trabajos de demolición duren de mayo a agosto. Se van a tirar doce naves que servían para la fabricación de colchones, que ocupan una superficie de 66.000 metros cuadrados. Se van a salvar de la piqueta la característica torre, que servirá de emblema para el nuevo centro comercial, y las oficinas en forma de colmena que hay en su base, donde irá la zona de restauración.

El resto quedará preparado para acoger el conjunto de calles comerciales, con establecimientos que presentarán descuentos de entre el 30% y el 70%. Habrá alrededor de 90 tiendas gracias a una inversión prevista de alrededor de 60 millones de euros que permitirá la creación de unos 1.800 puestos de trabajo.

Según las citadas fuentes, durante el derribo se va a tratar de reciclar la mayor cantidad de materiales posible. Por ejemplo, el hormigón de las soleras y de los muros se triturará y se reutilizará en las propias calzadas del ‘outlet’ de la carretera de Logroño.