Forestalia y el Circe colaboran en la producción de pellets con desechos agrícolas locales
Analizarán las mezclas realizadas con zuro de maíz, paja de cebada, hueso de oliva o cáscara de pipa de girasol.
El Centro de Investigación de Recursos y Consumos Energéticos (Circe) de la Universidad de Zaragoza y la empresa aragonesa Forestalia han firmado un acuerdo de colaboración para impulsar el desarrollo de la I+D en energías renovables en Aragón.
Fruto de este acuerdo surge el proyecto Perla, auspiciado por el programa Innovaragón del Gobierno de la Comunidad, con el que se estudiarán las posibilidades de producir "el mejor pellet obtenido a partir de las mezcla de los mejores subproductos agroforestales aragoneses", explicaron ayer fuentes de la empresa. Para ello se utilizará zuro de maíz (producto proveniente de la molienda de los restos de la mazorca del maíz después de retirar los granos), cáscara de pipa de girasol, hueso de oliva o paja de cebada, así como cultivos energéticos (eucalipto, chopo o pino), producciones todas ellas existentes en Aragón. Con ellas se están realizando actuaciones de optimización del almacenamiento, caracterización de materias primas y definición de mezclas, pruebas de peletizado de las mezclas, ensayos de combustión y rendimiento energético.
Forestalia aportará subproductos almacenados en las instalaciones de la localidad zaragozana de Erla, donde la compañía aragonesa tiene previsto poner en marcha "la mayor planta de peletización de España", en la que se fabricarían este nuevo tipo de productos. Precisamente la compañía aragonesa recordó ayer que tiene previsto comenzar en los próximos meses la instalación de la maquinaria necesaria para comenzar la producción en dicha planta en la primavera o más tardar en el verano de 2017.
No solo Forestalia podrá aprovechar el resultado de este análisis, que también podrá servir de base, señaló el Circe, "de nuevos proyectos e inversiones de biomasa como recursos energético al tiempo que se favorece la sostenibilidad en el uso de recursos de la región".
Así, los primeros trabajos de investigación se centrarán en el análisis de la disponibilidad en Aragón de biomasa derivada de herbáceos y frutales, así como de las neescidades logísticas para su adecuado manejo. "Se trata de cuantificar qué producción agraria hay disponible en cada zona y cuánta podría utilizarse para usos energéticos y eléctricos", matizaron fuentes de Forestalia.
Los resultados de este proyecto tienen también la vista puesta en Europa, ya que el fin último es poner en manos de la Comisión y de diferentes entidades públicas herramientas que ayuden a la toma de decisiones en sus estrategias territoriales y logísticas en proyectos relacionados con la biomasa.
