BSH invertirá 5 millones en su fábrica de La Cartuja en otra línea de paneles de lavadoras

La innovación es consustancial a BSH. Solo en 2015, el grupo desembolsó un total de 450 millones en I+D para todas sus plantas en el mundo, lo que supone el 4% de sus ingresos. De esa cuantía 23 millones se destinaron a las plantas españolas, un 20% más que el año anterior. Una buena parte de esa inversión se quedó en la ampliación del centro de tecnología de Montañana y de la fábrica que tiene enfrente y que se está haciendo más grande al haber incorporado las antiguas naves de Fuyma para así ganar espacio y poder separar las líneas de fabricación de hornos de las de las placas de inducción.

En los próximos meses, la reorganización de líneas llegará también a la planta de La Cartuja, especializada en lavadoras, que estrenará una nueva línea de fabricación del panel frontal de este electrodoméstico. La inversión superará los cinco millones y la previsión es que las máquinas empiecen a llegar la última quincena de julio. "El proyecto de ingeniería y la instalación está ya realizado. Solo falta que el consejo de gerencia de Alemania le dé el visto bueno definitivo", explicaron fuentes del sector. "Lo que se va a hacer es ampliar la sección de mecánica y chapa con una nueva línea. La de pintura, al necesitar menos espacio porque la chapa viene ya tratada de origen, lo va a ceder al área de mecánica", dijeron las citadas fuentes, conocedoras de la inversión desde que hace más de un mes la dirección se lo comunicase verbalmente.

Cerca de 400 personas trabajan en la fábrica de BSH, remodelada por completo hace seis años, y que en unos meses incorporará una nueva línea, completamente automatizada, para hacer el panel frontal de lavadoras. "Te da más capacidad y más seguridad", aseguraron las mismas fuentes. "En caso de que se rompa un troquel en una línea, puedes seguir fabricando en la otra". La instalación de la nueva línea será rápida, añadieron. "Ya fue así en 2010 cuando se produjo la renovación de la planta. Trajeron las máquinas y las montaron en pocos días. Ahora se trata de una reorganización interna más sencilla", indicaron. "Es una inversión importante para nosotros, pero para una multinacional que está constantemente introduciendo modificaciones en sus fábricas para ganar en eficiencia, no deja de ser una más", dijeron.

La planta de BSH en La Cartuja produjo en 2015 unas 740.000 lavadoras. Ha habido años de más y de menos ya que durante la crisis el consumo en el mercado español bajó mucho y la exportación palió en parte esa caída. BSH, que incluye a la marca aragonesa Balay, controlada ya solo por Bosch tras la salida de Siemens, cerró 2015 con una facturación de 12.600 millones, lo que supone un incremento de casi un 11% respecto al ejercicio anterior. "2015 fue el año de mayor éxito en la historia de BSH", según Karsten Ottenberg, presidente del Consejo de Administración.