De Guindos: "El crecimiento ha vuelto a acelerarse en el último trimestre"

El ministro de Economía y Competitividad anticipa que en el cuarto trimestre el PIB habrá crecido el 0,9% intertrimestral, una décima más que en el tercero.

El ministro Luis de Guindos.
El ministro Luis de Guindos.
Luis Tejido

Luis de Guindos (Madrid, 1960), ministro de Economía y Competitividad, se enorgullece de los cambios introducidos en la economía española durante la legislatura que ahora concluye y que han permitido, dice, corregir muchos de los desequilibrios que arrastraba, como el déficit por cuenta corriente o cambiar la tendencia de destrucción de empleo. En estos cuatro años se ha evitado el rescate país –sustituido por el rescate financiero– y la prima de riesgo ha vuelto a niveles asumibles. Permanece, no obstante, un gravísimo problema de paro y la vulnerabilidad que provoca los altos niveles de endeudamiento y de necesidad de refinanciación. Asuntos que quedan para el próximo gobierno, aunque ahora De Guindos evita descartar su presencia en él.


¿Cuál es su balance de esta legislatura?

Esta legislatura tiene más luces que sombras. Somos los que más crecemos, un 3,3% este año, con una creación de empleo de 600.000 puestos de trabajo, un superávit de la balanza de pagos del 2%, una inflación negativa, crecimiento de las exportaciones y va a haber un incremento de la renta de las familias en torno al 4% por la evolución del empleo y de los salarios. Más allá de la situación del mercado laboral, España tiene un crecimiento muy equilibrado donde se han corregido muchos desequilibrios.


¿Y las debilidades?

Todavía tiene el problema de la tasa de paro del 21%. Sin embargo, en estos momentos el umbral de crecimiento a partir del cual la economía española crea empleo es del 0,7%; antes había que crecer al menos el 2% para que se creara empleo. Ahí, la reforma laboral ha tenido efecto. Además, aún tenemos muchísima deuda privada a la que hay que sumar la deuda pública. El año que viene, España tiene que renovar 400.000 millones de endeudamiento entre el sector privado y el público y eso te hace vulnerable.


¿La economía española se desacelera?

Estoy convencido de que el cuarto trimestre va a ser mejor que el tercero. Todo el mundo está dando un perfil con desaceleración económica en el tercer trimestre que continúa en el cuarto trimestre, algo que también estaba implícito en nuestro propio cuadro macroeconómico. Pero eso ahora ya no lo vemos. Los indicadores adelantados se han acelerado y creo que en el cuarto trimestre el PIB crecerá un 0,9%. Esto tiene importancia no solo porque el año acabaría en la previsión del Gobierno, sino porque no es lo mismo entrar en 2016 con una economía desacelerada que con una economía en aceleración. Simplemente con la inercia que llevas, si el crecimiento medio de cada trimestre el año que viene fuera el 0,7%, ya se alcanzaría el 3% anual. La economía española va a tener este año un crecimiento por encima del 3%, eso no lo cuestiona nadie y el año que viene estará próximo al 3%. Va a tener dos años de crecimiento económico sin burbuja de crédito ni inmobiliaria.


La legislatura acaba con menos paro, pero también menos empleo que el que había en noviembre de 2011.

Estoy convencido de que, en términos EPA, en el cuarto trimestre de 2015 va a haber más empleo que el que había en el cuarto trimestre de 2011. También habrá más afiliados a la Seguridad Social. Pero, además, lo importante es la tendencia. Cogimos una economía en la que se estaban destruyendo 600.000 empleos al año y la dejamos con crecimiento de empleo. La proyección que tenemos es acabar con entre 20.000 y 30.000 ocupados más en términos EPA que los que había al cierre de la legislatura anterior.


¿Se está repartiendo el trabajo en lugar de aumentarlo?

El contrato a tiempo parcial no es el que está generando empleo porque hay un incremento del número de horas trabajadas que está ligado a la existencia de contratos a tiempo completo. Además, España está en el 15% de trabajo a tiempo parcial, por debajo de la media de la zona euro, que es del 22%.


La Comisión Europea critica la excesiva dualidad del mercado de trabajo en España. ¿Hay margen para la autocrítica en materia de reforma laboral? ¿Ha servido para reducir la dualidad?

En un país que llegó a tener la tasa de paro en el 27%, solo tienes un objetivo: crear empleo. Si no lo haces, te encuentras con el rescate porque no hay ingresos. España estaba en una depresión profunda. Cuando empiezas a crear empleo aumenta la confianza y, por tanto, el consumo. Efectivamente, sigue habiendo una parte de precariedad en España, un 25% de los asalariados son temporales. Pero lo más importante es asentar la recuperación económica y que se mantenga la confianza; después, hay que intentar incentivar la contratación indefinida.


¿Hay riesgo de que la confianza se pierda tras las elecciones?

Las elecciones siempre son un interrogante por lo que puede pasar. Si las elecciones no fueran a finales de 2015, la mayoría de los analistas estarían revisando al alza las previsiones de crecimiento para España en 2016. De todas formas, los mercados empiezan a descontar que va a haber un gobierno razonable. Cuando Syriza ganó en Grecia y Podemos subía en las encuestas fue el momento de mayor preocupación de los inversores sobre España. Con Cataluña nunca vi esa preocupación.


¿Qué ha fallado en Abengoa para que vuelva a ocurrir un caso de esta magnitud?

La situación de Abengoa es consecuencia de varias cosas pero no de las decisiones del Gobierno sobre renovables. En última instancia, lo que ha fallado es lo que falla siempre: que los gestores se han equivocado en sus decisiones.

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