Fitch mantiene la nota de España en un aprobado alto

La agencia considera que, aunque la economía española vuelve a crecer con solidez, se trata sólo de una recuperación cíclica.

La agencia de calificación de riesgo Fitch ha decidido este viernes mantener la calificación de la deuda española en un aprobado alto (BBB+) con perspectiva estable, porque considera que el "sólido crecimiento" de la economía española es solo una recuperación cíclica.


La agencia señala las próximas elecciones generales de diciembre como un factor que añade incertidumbre respecto a la política de reducción del déficit público.


Fitch cree que este año el objetivo de déficit apenas se desviará una décima (hasta el 4,3 % del PIB) respecto de lo comprometido con Bruselas, pero para 2016 prevé un incumplimiento mayor (3,1 % frente al 2,8 %).


Respecto a las demandas soberanistas de una parte importante de la población de Cataluña, dice que incrementarán las tensiones entre el gobierno central y los autonómicos, aunque cree que el resultado de las elecciones de septiembre ha alejado la posibilidad de una crisis constitucional a corto plazo.


No obstante, entiende que las tensiones persistirán y que constituirá un reto para el próximo Gobierno alcanzar un acuerdo con Cataluña que sea satisfactorio para ambas partes y para el resto de gobiernos autonómicos.


Fitch mantiene que el potencial de crecimiento de la economía española es del 1,5 % para el medio plazo, gracias a las reformas estructurales llevadas a cabo y a pesar de que los riesgos son mayores.


Por ello, la agencia ha revisado al alza recientemente sus previsiones de crecimiento para España, hasta el 3,1 % en 2015, el 2,6 % en 2016 y el 2,2 % en 2017.


En el informe publicadodice que la evolución económica del país se ha visto beneficiada en los últimos meses por unas mejores condiciones de financiación de la deuda soberana y cree que en los próximos años se mantendrá la tendencia en el ahorro de intereses.


Sobre los bancos, señala que la sólida recuperación económica, la caída de la tasa de desempleo y la estabilización de los precios de la vivienda han favorecido la calidad de los créditos, lo que ha reducido el riesgo de que el sistema financiero pueda volver a desestabilizar la economía.


El informe explica que podría subir la nota de España si se producen mejoras en el ritmo de reducción del déficit del Estado central, gracias a las reformas estructurales, y si eso lleva a una caída del nivel de deuda sobre el PIB.


También subiría la calificación si mejora la confianza y eso lleva a una evolución del mercado laboral mejor de la pronosticada o si el saldo de la balanza de pagos es más favorable de lo esperado.


En sentido contrario, supondría una bajada de nota el estancamiento del proceso de reducción de déficit público y el freno a las reformas.


Asimismo, influirían negativamente sobre la calificación de España un crecimiento del PIB por debajo de lo esperado, un aumento de la ratio de deuda o una importante desviación del déficit de las comunidades autónomas.


De momento, Fitch mantiene la calificación con perspectiva estable porque asume que el nuevo Gobierno que salga de las urnas en diciembre mantendrá la política de estabilidad presupuestaria y de reducción del nivel de deuda.


La agencia también cree que el riesgo de deflación se mantendrá alejado gracias a la política del Banco Central Europeo (BCE).

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión