El coste laboral por trabajador y mes en Aragón baja un 1,7%

Alcanzó los 2.331,45 euros en el tercer trimestre del año.

El coste laboral de las empresas por trabajador y mes alcanzó en Aragón los 2.331,45 euros en el tercer trimestre del año, lo que supone un descenso del 1,7 % respecto al mismo periodo de 2013.


El coste salarial (que incluye salario base, complementos, pagos por horas extraordinarias y atrasos, todo medido en términos brutos) se situó en la comunidad en 1,692,46 euros, un 0,5 % más, aunque más de 200 euros por debajo de la media nacional, que fue 1.800,46 euros por trabajador y mes, un 0,1 % inferior a 2013.


El coste laboral por hora efectiva fue en la comunidad fue 19,88 euros, un 0,4 % menos, mientras que el salarial fue 14,43 euros, un 1,8 % más.


En cuanto a los otros costes no salariales, en Aragón el descenso ha sido del 6,9 %, hasta situarse en los 638,99 euros, por las menores indemnizaciones por despido o por fin de contrato, pagos compensatorios, pequeño utillaje, ropa de trabajo o selección de personal.


Según la Encuesta Trimestral de Coste Laboral (ETCL) difundida por el Instituto Nacional de Estadística (INE), el coste laboral medio en España fue 2.450,10 euros en el citado periodo, lo que supone una caída del 0,4 % respecto a 2013, un descenso que se suma al experimentado también en el primer y segundo trimestre de 2014.


El coste salarial (que incluye salario base, complementos, pagos por horas extraordinarias y atrasos, todo medido en términos brutos) se situó en 1.800,46 euros por trabajador y mes, un 0,1 % inferior a 2013.


El coste salarial es el componente que más influye en el coste total en que incurre un empleador por trabajador y mes.


En cuanto a los otros costes no salariales, el descenso fue del 1,5 % (649,64 euros), debido a que las percepciones no salariales se recortaron el 19,6 % (74,38 euros), por las menores indemnizaciones por despido o por fin de contrato, pagos compensatorios, pequeño utillaje, ropa de trabajo o selección de personal.


Este descenso de las percepciones no salariales compensaron el aumento del 9,9 % de las subvenciones y bonificaciones (10,35 euros) y el 1,6 % que experimentaron las cotizaciones obligatorias a la Seguridad Social (585,61 euros).


El coste laboral por hora bajó el 0,1 %, un descenso inferior al del coste por trabajador y que se debió a la caída del número de horas efectivas de trabajo.


Si se elimina este efecto y el de calendario, el descenso calculado del coste por hora fue también del 0,1 %.


Por sectores, la industria con 2.946,97 euros y la construcción con 2.560,04 euros fueron los que registraron un aumento de los costes laborales (del 1 % y del 0,4 %, respectivamente), en tanto que el de servicios (con 2.349,41 euros) contabilizó una caída del 0,7 %.


En concreto, el sector servicios achaca el descenso de todos los componentes del coste laboral.


En el caso de la industria, destaca el crecimiento de los salarios ordinarios y la menor bajada de otros costes, como consecuencia del descenso en los despidos e indemnizaciones por fin de contrato.


Por actividades, los mayores incrementos del coste laboral se dieron en las actividades profesionales, científicas y técnicas (2,3 %), en la Administración Pública y defensa (2 %) y el suministro de agua (1,9 %).

Por el contrario, los mayores descensos se contabilizaron en las actividades financieras y de seguros (4,9 %), las actividades inmobiliarias (4 %) y las industrias extractivas (3,5 %).


Por comunidades autónomas, el coste laboral en el País Vasco y Madrid superó en más de 400 euros a la media nacional, mientras que en Extremadura, Canarias y la Comunidad Valenciana fue inferior a la media en más de 300 euros.


Atendiendo al crecimiento interanual del coste, Cantabria, Canarias y Madrid presentaron las tasas de crecimiento más elevadas, mientras que Comunidad Valenciana, Cataluña y País Vasco contabilizaron los menores incrementos.


Durante el tercer trimestre, la jornada semanal media pactada fue de 34,3 horas (considerando conjuntamente el tiempo completo y el parcial), de las que se perdieron unas 7 horas de media semanales, la mayoría por vacaciones.


Si se añaden las horas extra y se restan las perdidas, la jornada semanal se reduce a 27,7 horas efectivas de trabajo.


La diferencia salarial entre los trabajadores a tiempo completo y parcial fue de 5,34 euros por hora (15,67 euros/hora para el completo y 10,33 euros/hora para el parcial).


En cuanto al tiempo de trabajo, los trabajadores a tiempo completo prácticamente duplicaron las horas de trabajo efectivo frente a los que contaban con jornada parcial (30,8 horas semanales frente a 17,6).