Aragón creció el 1,6% en el segundo trimestre, 4 décimas por encima de la media nacional

Bono cree "un hecho la recuperación económica" pero se plasmará "con retardo" en el empleo.

Francisco Bono
Aragón creció el 1,6% en el segundo trimestre, 4 décimas por encima de la media nacional
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La economía aragonesa registró un crecimiento del 1,6 por ciento entre abril y junio de este año, cuatro décimas por encima de la media nacional, empujada por un mayor aumento de la demanda interna, la inversión, las exportaciones o la producción industrial.


Estos son los datos ofrecidos por el Gobierno de Aragón, que han sido anunciados por el director general de Economía, José María García, y el consejero del departamento, Francisco Bono, quien ha afirmado que la mejora "no es casual".


A su juicio, estos datos reflejan que las empresas ya han superado su "travesía en el desierto" y han recuperado sus niveles de producción, aunque ha advertido de que estos indicadores se plasmarán "con retardo" en el empleo.


El informe destaca que el crecimiento económico en el segundo trimestre se situó cuatro décimas por encima que la media española y que, con toda seguridad, la previsión para el conjunto de 2014 se mantendrá en el 1,2 por ciento, con un tercer trimestre algo más a la baja en comparación con el anterior y un repunte en el último.


También mantiene la previsión de crecimiento para 2015 en el 2 por ciento, ya que España es uno de los pocos países en los que el Fondo Monetario Internacional (FMI) revisó sus perspectivas de crecimiento al alza y desde el ejecutivo autonómico sostienen que el impacto de la desaceleración en varios países europeos será "limitado" y no lo suficientemente grande para cambiar las expectativas.


En este sentido, Bono ha señalado que le preocupa más el conflicto catalán que la economía francesa, al ser la comunidad vecina el primer cliente de las empresas aragonesas.


Según el informe, son el incremento del consumo de los hogares y, sobre todo, de la inversión en bienes de equipo los principales artífices de la recuperación económica y de que esta se venga produciendo a una mayor velocidad que en el resto del país.


Así, tras años en números negativos la demanda interna comenzó a crecer en 2013 y en el segundo trimestre del presente ejercicio creció hasta el 3,3 por ciento, casi un punto por encima de la media nacional, mientras que la inversión en bienes de equipo incluso superó los dos dígitos hasta crecer un 13,6 por ciento en el mismo período, casi cinco puntos más que en el conjunto de España.


La industria, tras una profunda caída en los años 2012 y 2013, mayor si cabe que la del total del país, se recuperó hasta un 2,6 por ciento, 1,2 puntos más que la media estatal, y los servicios lo hacían un 1,6 por ciento, prácticamente en línea con la media española.


Otro síntoma positivo lo encontramos en la construcción, en números rojos desde mediados de 2008, que se acerca por primera vez en estos años al crecimiento al anotarse un descenso de tan solo una décima con respecto al mismo trimestre de 2013, tres puntos menor que el del conjunto de España.


En cuanto a las exportaciones, en dicho período aumentaron un 3,7 por ciento, muy por debajo del incremento de las importaciones -18,5 por ciento-, algo que el consejero ha explicado por el aumento de la inversión en bienes de equipo, que vienen de fuera, y ha aclarado que en todo caso el comportamiento es mejor que el del resto del país.


En lo relativo al mercado laboral, la tasa de paro se redujo hasta el 20,8 por ciento, con un diferencial positivo con el total español de 3,7 puntos, y con un incremento de la población activa y del empleo, si bien con un aumento de los salarios aún bastante exiguo, de un escaso 0,4 por ciento.


Por tanto, el consejero de Economía se ha apresurado a afirmar que "es un hecho la recuperación económica" y que esta se está produciendo de manera más acelerada que en el caso español y el de otros países europeos.


Ha valorado también que la incertidumbre "afortunadamente" se vaya despejando, lo que se refleja en el aumento de la demanda interna y en que, por primera vez, la construcción parece que pueda volver a los números positivos, especialmente porque vuelve a crecer la inversión pública, aunque no de la forma "deseable", y porque los excesos de excedentes ya se van absorbiendo y se comienza a necesitar nueva oferta.


Asimismo, Bono ha aseverado que, aunque pueda haber variaciones sobre las predicciones iniciales, la recuperación económica "no está en riesgo" y tampoco ve riesgo de deflación a pesar de que pueda haber períodos con bajadas de precios.