​Un ERE en el Grupo Solano deja a 34 trabajadores en la calle

Los concesionarios de Seat y Chevrolet han quedado en concurso de acreedores.

Un total de 34 trabajadores de los concesionarios de Seat, en la carretera de Castellón, y Chevrolet se han quedado sin empleo tras un Expediente de Regulación de Empleo en Casa Ciudad Automoción, más conocida como Grupo Solano.


El grupo automovilístico, propietario de varias empresas como Motor Aragón, gestora del concesionario de Seat, se encuentra desde hace unas semanas en proceso de concurso de acreedores.


Aunque sindicatos y empresa todavía no han cerrado el acuerdo con las condiciones del despido, desde CCOO aseguran que "coinciden en los puntos principales".


Los 34 trabajadores serán indemnizados por el Fondo de Garantía Salarial con 20 días por año trabajado, lo correspondiente a este tipo de despidos colectivos. El Fogasa también cubrirá parte del salario de los dos meses de trabajo que la empresa adeuda a los empleados. Según CCOO, lo restante lo cubrirá la empresa con la futura venta de activos. "En este punto parece que estamos de acuerdo porque la empresa está mostrando su disposición para que los trabajadores cobren sus salarios", ha explicado Ana Pilar Sánchez, secretaria general de Industria de CCOO. 


Se espera que ambos actores firmen el acuerdo con las condiciones finales entre este miércoles y el jueves, día en el que se hará oficial el ERE. 


El Grupo Casa Ciudad Automoción con más de 90 años de experiencia en el sector de la venta de automóviles se vio gravemente afectado por la crisis lo que supuso el cierre y la venta de la mayoría de sus instalaciones repartidas por la Comunidad. En el verano de 2013 le llegó el turno al concesionario Auto Delicias que acabó en concurso de acreedores y con un gran mazazo para la distribuidora oficial de la marca Seat en Zaragoza. Unos meses después, el concesionario Audi Solano, propiedad de la misma empresa, era adquirido por Automoción Aragonesa, dedicada principalmente a la venta de vehículos Volkswagen.


En vista a las pérdidas de la empresa, hace meses que la plantilla de Motor Aragón en el concesionario de Seat y el de Chevrolet se temían lo peor.